Los genes y el cáncer de próstata

En la investigación fueron analizadas 1.900 muestras de sangre de hombres que participaron en el Programa de Detección Precoz del Cáncer de Próstata en Australia. Así, de los que participaban en el estudio, 867 tenían un diagnóstico certero de la enfermedad y 1.036 de ellos no tenían cáncer.
De esta manera, los especialistas encontraron que las llamadas variaciones en el número de copias desempeñaban un papel importantísimo en el desarrollo del cáncer de próstata. Así, se encontró que dos números de copias eran significativamente distintas en los hombres diagnosticados con cáncer y en los que no lo tenían.
En este sentido, hallaron además que estas dos variantes ayudaban a las células cancerosas a desarrollarse e invadir los órganos del cuerpo. De esta manera, los hombres que poseían estas variaciones tenían un riesgo cuatro veces más elevado que el resto de padecer de cáncer de próstata.
Sin embargo, los investigadores afirman que estas variantes no resultan las únicas causas del cáncer de próstata, sino que seguramente en la aparición de la enfermedad influyen otros factores de riesgo. No obstante, puntualizan que estas variaciones pudieran resultar eficaces en la detección temprana del riesgo de padecer este tipo de cáncer.
Así mismo, aseveran que las diferencias genómicas pueden dar respuesta al aspecto diferente de los hombres con riesgo de padecer cáncer de próstata, así como a la manera en que responden a los medicamentos y a la forma en que desarrollan la enfermedad.