Prevenir las enfermedades tecnológicas

Con el desarrollo de las tecnologías de la información y las comunicaciones también han aparecido nuevas patologías, también denominadas enfermedades tecnológicas. Estas enfermedades tecnológicas normalmente no son provocadas por la tecnología en sí misma sino por el mal uso que se hace de la misma. De esta forma, es posible prevenir estos problemas de salud si se toman las precauciones necesarias.

Por ejemplo, para contrarrestar los efectos del uso prolongado del ordenador, los oftalmólogos recomiendan un descanso a la vista cada 15 minutos. En este descanso se deben alzar los ojos de la pantalla del ordenador y enfocar la mirada en aquellos objetos que se encuentren a una mayor distancia. Un detalle importante es evitar que la luz caiga directamente en la pantalla para evitar el reflejo que esto provoca.

En el caso de los dolores músculo-esqueléticos que se relacionan con el ordenador, los reumatólogos recomiendan seguir atentamente las recomendaciones de la ergonomía:

– Ubicar la pantalla justo delante de nuestros ojos para no tener la necesidad de voltear el cuello y dañar las vértebras cervicales o los músculos de esta zona.

– Los brazos deben formar un ángulo recto con la mesa y es necesario tener espacio para apoyar las muñecas.

– La espalda debe estar apoyada en el respaldo pero cuidando siempre que la posición sea erguida y los hombros relajados.

– Apoyar totalmente los pies en el suelo.

En relación con los problemas de índole psicológica, particularmente los relacionados con la adicción, es importante concientizar que no tenemos la necesidad de estar 100% conectados a Internet o siempre disponibles para responder al teléfono móvil.

La tecnología debe ser una ayuda para facilitarnos la cotidianidad y no un problema. Por ello es importante establecer horas para conectarse y determinar días o momentos en los cuales nos dedicaremos exclusivamente a otras actividades. Para aquellos que no puedan hacerlo, existen aplicaciones informáticas que, previamente configuradas, impiden el acceso a ciertas páginas web o redes sociales.

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