Los tratamientos para el ACV: Mientras antes se apliquen, mejores resultados

Ahora un estudio publicado en la revista The Lancet afirma que entre todos los tratamientos para el ACV que existen, el empleo del trombolítico activador del plasminógeno tisular podría resultar muy efectivo en las personas que han padecido un accidente isquémico, sobre todo si se emplea durante las primeras horas consecutivas a la aparición del ictus.
Para arribar a estos resultados los investigadores dela Universidadde Edimburgo y del Hospital Occidental de Escocia examinaron los expedientes médicos de 3.035 pacientes de varios países que habían padecido un ACV. De ellos, cerca de 1.515 habían recibido el trombolítico en las primeras horas luego de haber sufrido el ictus.
De esta manera, hallaron que, tras seis meses del tratamiento, un número ligeramente mayor (37%) estaban vivos y poseían una clara independencia; en comparación con el 35% de los demás pacientes que no emplearon este tratamiento. Además, se apreció que los pacientes tratados con este trombolítico después de tres horas de haber sufrido el ictus mostraban una mejoría notable.
En este sentido, los investigadores afirman que el empleo del trombolítico para desintegrar los coágulos de sangre que se alojan en el cerebro en los pacientes que han sufrido un ACV isquémico resulta muy efectivo, sobre todo si se utiliza en las primeras tres horas después de haber ocurrido el ACV. No obstante, si este agente se emplea durante las primeras seis horas, también es un tratamiento eficaz.
Por ende, las personas que sufran un ACV, deben acudir lo más rápido posible al médico ya que de este forma podrán recibir un tratamiento rápido y eficaz.