Los riesgos del bajo peso

Si bien es cierto que el sobrepeso u obesidad ocasionan severos daños al organismo humano, también es cierto que los riesgos del bajo peso pueden incidir muy desfavorablemente en nuestro estado de salud. De hecho, en nuestros días esto se ha convertido en una gran preocupación para los técnicos sanitarios ya que la moda dicta que mientras más delgada sea la mujer, más bella será.

De esta manera, son muchas las chicas que optan por seguir una dieta demasiado restrictiva que les priva de las vitaminas y los minerales que necesita. Por supuesto, también hay otras personas que sufren de bajo peso sin haberlo elegido ya que sufren problemas metabólicos y dificultades en la absorción intestinal.

De forma general quienes tienen un bajo peso con frecuencia poseen un sistema inmunológico debilitado y por ende un mayor riesgo de sufrir infecciones. Esto sucede, sobre todo, debido a la escasez de nutrientes que se incorporan al organismo, lo que reduce considerablemente las defensas del mismo.

Es común además que estas personas posean un mayor riesgo de sufrir osteoporosis y problemas ortopédicos (siempre ocasionados por la escasa incorporación de nutrientes). Así, el metabolismo prioriza el funcionamiento de los órganos vitales y descuida aquellos que no son imprescindibles para la supervivencia de la persona como los huesos u otros órganos y sistemas.

De manera similar, es frecuente que las personas con bajo peso padezcan de una progresiva pérdida del cabello a consecuencia de la escasa acumulación de proteínas y nutrientes que obligan al metabolismo humano a desatender funciones secundarias como la formación y desarrollo del cabello.

En el caso de las mujeres con bajo peso, las probabilidades de padecer problemas de fertilidad son mayores. La amenorrea o cese de la menstruación suele presentarse como un indicador de que las reservas grasas del organismo son tan escasas que no alcanzan para procrear.

  Consejos, Enfermedades