Los síntomas de la lipotimia
La lipotimia es una de las expresiones más frecuentes del síncope y por lo general sobreviene cuando la presión sanguínea desciende repentinamente. Esta afectación suele presentarse en casi el 80% de la población, sobre todo entre quienes padecen de uno o más episodios de desmayos durante su juventud.
En la mayoría de los casos la lipotimia se asocia con permanecer largo rato de pie, con una excesiva transpiración, por estar en un ambiente caluroso, por sufrir episodios de miedo, por no comer o hacerlo en exceso, al padecer emociones fuertes o al incorporarse bruscamente. Ante situaciones de este tipo suele presentarse una repentina disminución de la tensión arterial que provoca la lipotimia.
Entre los síntomas de la lipotimia se encuentran: debilidad, náuseas, piel pálida, mareos, sudoración y frialdad, flojera en las piernas, pérdida total o parcial de la visión y zumbidos en los oídos. No obstante, aunque estos signos indican la posible aparición de una lipotimia, por lo general aparecen de manera inminente, por lo que el desmayo no se puede evitar. En otras palabras, cuando se experimentan estos síntomas la persona ya está vivenciando el desmayo.
Aún así, los especialistas indican que debemos estar alertas sobre la frecuencia con que se producen estos ataques pues si suelen ser esporádicos y de rápida recuperación no presentan ningún problema, pero si por el contrario se vuelven frecuentes en períodos cortos de tiempo, es recomendable realizarse un estudio que identifique las causas que los están ocasionando.
Por lo general, estos desmayos pueden considerarse un mecanismo de defensa del organismo que, ante situaciones estresantes donde la sangre no aporta los suficientes nutrientes al cerebro, este tiende a desconectarse, lo que provoca que la persona pierda el conocimiento. En estos casos, cuando la persona cae al suelo en una posición horizontal recupera la circulación adecuada y los niveles de tensión arterial, reanudando poco a poco sus funciones sin presentar secuelas posteriores.
Sin embargo, la persona en estos casos no está exenta de riesgos, pues la relajación de la lengua puede obstruir la vía respiratoria, por lo que se aconseja en los casos de lipotimia poner a la persona en una posición lateral que le facilite la respiración. De la misma forma, se puede provocar traumas craneales al caer al suelo.