Frituras más sanas
Las frituras son uno de los enemigos de la dieta, ya que el aceite, al calentarse, pierde sus propiedades benéficas y las grasas insaturadas propias del aceite vegetal se convierten en saturadas. Es por eso que se recomiendan otras formas de cocción como el horno, el grill o la parrilla. No obstante, es posible comer frituras más sanas. Y para eso te damos algunos consejos.
Elige aceite de oliva. El aceite de oliva requiere una mayor temperatura para que sus propiedades se pierdan por completo. Es por eso que resistirá mejor el fuego y será menos nocivo que aceites como el de girasol o maíz.
Limpia los alimentos fritos. Cuando sacas de la sartén una fritura, es bueno poner una servilleta de papel por debajo y encima, de modo que esta absorba toda la grasa que sea posible. Recuerda que las grasas son muy calóricas y son la principal causa de obesidad.
Fríe con un fuego moderado. Si pones el fuego muy fuerte, no sólo se te quemarán los alimentos, sino que se dañará el aceite y se absorberá con más facilidad por los alimentos. Entre 170 y 180º es la temperatura recomendada para casi todas las frituras.
No uses poco aceite. Una paradoja que mucha gente no cree es que las frituras más grasosas son aquellas que se hacen con menos aceite. Cuando se sumerge la comida en aceite en lugar de simplemente tirarla en una sartén con apena sun poco de aceite, la absorción es menor.
Renueva el aceite. No es bueno cocinar muchos alimentos con el mismo aceite, por lo que deberías renovarlo cuando este empieza a tener una capa blanca con motivo de un uso excesivo.