¡Cuidado con los envases de plástico!
Vivimos en la época del plástico, gran parte de los alimentos que consumimos día a día vienen en envases de plástico, sobre todo porque así nos resulta más cómodo. Sin embargo, ¿sabías que esta comodidad tiene un precio triple, para el bolsillo, para nuestra salud y, por último lugar pero no por ello menos importante, para el medio ambiente?
Muchos de los plásticos que hoy se usan en la industria alimenticia contienen los famosos COPs, o sea, compuestos orgánicos persistentes. Se trata de sustancias tóxicas que permanecen durante mucho tiempo en el medio ambiente porque no se degradan con facilidad. En el caso de nuestro organismo, lo que hacen es acumularse, sobre todo a través del tejido graso, desde donde afectan el sistema endocrino.
De hecho, algunos de estos COPs se convierten en disruptores endocrinos; es decir, sustancias que afectan el funcionamiento de las hormonas, ya sea suplantándolas, bloqueando su acción o simplemente alterando sus niveles.
La sustancia más peligrosa, que incluso se podía encontrar en los biberones de los niños antes de que la Comunidad Europea la prohibiese, es el bisfenol A. Esta sustancia interfiere en los estrógenos y, cuando se acumula en concentraciones elevadas, puede afectar el sistema nervioso, desencadenar la diabetes o provocar alteraciones en el sistema reproductor.
¿Qué podemos hacer?
Lo cierto es que no existen envases que sean seguros al 100%, decir lo contrario es una utopía pero asumir una postura demasiado aprehensiva solo nos complicaría innecesariamente la vida. Lo ideal es encontrar un punto medio. Por ejemplo, normalmente los envases que son fácilmente reciclables también representan un menor riesgo para nuestra salud y, además, son más respetuosos con el medio ambiente.
Otra opción consiste en comprar buena parte de los productos a granel. De esta manera no solo estarás evitando los envases de plástico sino que también ahorrarás ya que normalmente eliminas el costo del envase.
Finalmente, no calientes jamás un alimento dentro de un envase de plástico porque las probabilidades de que se disuelvan sus partículas aumentan considerablemente. De la misma forma, intenta no colocar en su interior alimentos demasiado calientes porque estos generarían el mismo efecto.
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