Consejos para adelgazar

Sabemos que la obesidad es uno de los principales problemas que aquejan a la salud de muchas personas. Y no hay demasiados secretos en ello: se trata de aquellas que consumen más calorías de las que deberían.

Pero muchas de ellas, sin embargo, argumentarán que siguen sin desviarse la dieta planeada, y que a su vez completan el ejercicio físico necesario. En estos casos puede que estén añadiendo calorías sin darse cuenta. Veamos algunos ejemplos de calorías que pueden ser consumidas sin que te percates de ello.

Calorías líquidas. Son muchas las personas que se cuidan con las comidas pero no con las bebidas. Se prohiben el pan, pero se dan siempre el gusto de la cerveza o el refresco. Sin embargo, las calorías consumidas sin necesidad son demasiadas. Puedes beber agua, refrescos dietéticos o una cerveza sin alcohol en tu salida con amigos para cuidar las calorías que tomas.

Aderezos. Aún cuando vivieras comiendo ensaladas (cosa que no es muy recomendable) no servirá de nada si a cada una añades enormes cantidades de aceite. Es cierto que el aceite vegetal crudo es muy saludable, pero sólo si lo consumimos con moderación. Lo mejor que puedes hacer es medir una cucharada sopera de aceite para condimentar tu ensalada.

Frituras. No es lo mismo una porción de carne a la plancha o al horno que frita. Lo mismo pasa con las verduras. Aquí sumas muchas calorías de grasas saturadas, como las que contienen los aceites calientes. Usa formas de cocción que no añadan calorías como el horno, la parrilla, el wok o la plancha.

Tamaño de las porciones. A veces nos engañamos pensando que sólo hemos comido «una porción», cuando no somos objetivos para medir lo que es «una porción». Es bueno advertir de que tamaño es cada una de las cosas que comemos, o manejar las cantidades a través de su peso (aunque esto sólo lo aconsejamos en casos muy específicos).

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