Cinco mitos sobre salud que deberíamos desechar
A lo largo de los años, la medicina científica ha ido echando por tierra numerosos mitos sobre salud. Sin embargo, en el imaginario popular existen algunas ideas que aún están muy arraigadas. Así, aunque la ciencia ha demostrado que se trata de costumbres o ideas erróneas, las personas siguen creyendo a pies juntillas en ellos.
A continuación analizaremos algunos de los mitos sobre salud que aún se mantienen vivos en la población mundial:
- Comer grasa engorda y causa daños a la salud. La verdad es que no todas las grasas son negativas. Por ejemplo, una dieta rica en ácidos grasos omega-3 no solo es muy saludables sino que también ayuda a perder peso y cuidar la salud de las células. Son las grasas animales, las grasas trans y las hidrogenadas las responsables de la gran mayoría de las enfermedades cardiovasculares y de la obesidad.
- Las grasas saturadas y el colesterol son dañinos. Se trata solo de una generalización errónea ya que realmente las grasas saturadas y el colesterol son esenciales para la función hormonal, la estructura celular y el metabolismo del calcio. Además, actúan como estabilizantes y protegen al organismo de daños por inflamación. Obviamente, cuando se comen en exceso son dañinas pero en la proporción justa no causan problemas mayores.
- Mientras más ejercicio físico, mejor. La actividad física es beneficiosa pero cuando no estamos acostumbrados, es mejor optar por sesiones de intensidad moderada. Debes saber que el ejercicio que incluye una actividad cardiovascular intensa por largos periodos puede fomentar la producción de cortisol que inflama el organismo y daña las articulaciones y los ligamentos. Por ende, es mejor limitarse a realizar sesiones de entrenamiento breves pero intensas durante unos 20 minutos 4/5 veces la semana.
- Me siento bien y eso significa que estoy sano. La verdad es que cada célula del cuerpo es golpeada unas 10.000 veces por segundo por los radicales libres. El corazón reconstruye todos los 60 billones de células que lo componen cada 7 meses. Por ende, tenemos la posibilidad de producir cada día entre 10.000 y 100.000 células cancerígenas. El hecho de que nos sintamos bien no es un buen motivo para no prevenir o ir al médico.
- Tengo salud hasta que no me enferme o me ocurra un accidente. Realmente la salud no es un estado que debemos comprender en positivo o negativo, más bien se trata de un continuum. Además, la salud no implica solo estar bien físicamente sino desde el punto de vista emocional. Por ende, cada vez que tomes una mala decisión en lo que respecta a tu estilo de vida, estarás afectando tu salud.