¡Atentos a las picaduras de mosquitos!
Estar expuestos a una picadura de mosquito es algo bastante usual, sobre todo con la llegada del verano. Sin embargo, la mayoría de las personas no son conscientes del gran riesgo que corren cuando son picados por este insecto. Y es que los mosquitos son transmisores de numerosas enfermedades infecciosas, entre ellas el dengue y la fiebre chikungunya, dos problemas de salud que se están extendiendo por todo el mundo.
El dengue es una enfermedad infecciosa que se transmite por la picadura del mosquito Aedes Aegypti, generalmente durante el horario diurno. Sus primeras manifestaciones suelen aparecer entre los 4 y 6 días posteriores a la picadura, presentándose fiebre alta, náuseas, dolores articulares y musculares, dolor de cabeza, gran cansancio y debilidad. En el último período de la enfermedad aparecen erupciones cutáneas por todo el cuerpo.
Por lo general, sus síntomas suelen ceder a partir de los 12 o 15 días, pero en algunos casos los dolores musculares pueden persistir durante meses, pues la enfermedad en sí no tiene cura por lo que el tratamiento se enfoca exclusivamente en aliviar la sintomatología.
Por otra parte, la fiebre chikungunya es una enfermedad vírica que se produce por la picadura del mosquito Aedes Aegypti o Aedes Albopictus, dos especies que viven fundamentalmente en Asia y África pero que ahora se ha extendido al Caribe.
Al igual que el dengue, las personas contagiadas con la fiebre chikungunya presentan fiebre alta, dolores musculares y de cabeza, cansancio generalizado y erupciones cutáneas. Por eso a veces el diagnóstico se confunde. Desgraciadamente, para esta enfermedad tampoco se ha encontrado cura y su tratamiento se basa en aliviar los síntomas, que pueden extinguirse a partir de los 15 días pero también pueden extenderse hasta casi un año.
Como no existe una vacuna que prevenga la infección, la única solución está en evitar las picaduras de los mosquitos.
¿Cómo evitar el contagio de las enfermedades transmitidas por los mosquitos?
– Evita estar mucho tiempo en zonas que tengan una escasa higiene ambiental.
– Usa ropa que cubra la mayor parte del cuerpo y preferentemente de colores claros.
– Utiliza repelentes de insectos, que puedes aplicar sobre la piel o la ropa.
– Evita estar cerca de criaderos de mosquitos, que por lo general habitan en aguas estancadas y zonas húmedas.
– Instala mosquiteros impregnados en insecticidas en las ventanas.
– Aplica insecticidas en las zonas donde sospeches que hay larvas de mosquitos.
– Extrema las medidas de protección cuando viajes fuera del país.
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