Siqualine Solucion Inyectable

Para qué sirve Siqualine Solucion Inyectable , efectos secundarios y cómo tomar el medicamento.

Advertencia! la información que ofrecemos es orientativa y no sustituye en ningún caso la de su médico u otro profesional de la salud..

SIQUALINE

SOLUCION INYECTABLE
Neuroléptico

BRISTOL-MYERS SQUIBB DE MEXICO, S. de R.L. de C.V. (DIVISION SQUIBB)

Denominacion generica:

Decanoato de flufenazina.

Forma farmaceutica y formulacion:

Cada frasco ámpula contiene:

Decanoato de
flufenazina …………. 25 mg

Vehículo, cbp …………. 1 ml

Descripción: SIQUALINE* es un decanoato éster derivado de la 4-(3-[2-trifluorometilfenotiazina-10-il] propil)-1 piperazina. Es un modificador de la conducta, con un efecto marcado y prolongado.

Indicaciones terapeuticas:

SIQUALINE* está indicado en el tratamiento a largo plazo de trastornos psicóticos (por ejemplo, esquizofrénicos crónicos). SIQUALINE* no se ha mostrado eficaz en el manejo de complicaciones de la conducta en pacientes con retardo mental.

Nota: SIQUALINE no está indicado en trastornos no psicóticos, o en tratamientos cortos (< 3 meses).

Farmacocinetica y farmacodinamia en humanos:

SIQUALINE* tiene actividad en todos los niveles del sistema nervioso central (SNC) así como en múltiples sistemas orgánicos. Su mecanismo de acción es desconocido, pero puede estar relacionado con sus efectos antidopaminérgicos. La esterificación de la flufenazina prolonga marcadamente la duración del efecto del medicamento.

Igual que otros fármacos antipsicóticos, la flufenazina se caracteriza por su variabilidad farmacocinética interindividual.

Aún cuando los preparados líquidos tienen una mejor absorción que las tabletas o cápsulas, la forma intramuscular proporciona una absorción y una biodisponibilidad más constantes. Las variaciones entre pacientes pueden deberse a factores genéticos y a la edad así como a interacción con otros fármacos.

La flufenazina es metabolizada extensamente, con un “primer paso” en el hígado, y excretada en la orina y heces. No se conoce aún el grado de actividad antipsicótica de sus metabolitos. La flufenazina se encuentra unida a proteínas (< 90%) en el plasma.

La esterificación de la flufenazina con ácidos grasos de cadena larga y su disolución en un vehículo de aceite de sésamo, prolonga la difusión y biodisponibilidad del medicamento libre a partir del sitio de depósito oleoso. Las concentraciones pico en el plasma ocurren dentro de las primeras 24 horas después de la inyección intramuscular. Su efecto inicial aparece generalmente entre las 24 y 72 horas después de la inyección de SIQUALINE, y el efecto sobre los síntomas psicóticos es significativo entre las 48 y 96 horas. Su vida media es aproximadamente de 7 a 10 días.

Las fenotiazinas atraviesan la barrera hematoencefálica, cruzan la placenta fácilmente, y no pueden ser extraídas con diálisis. No se sabe si la flufenazina se encuentre presente en la leche; sin embargo se ha demostrado que otras fenotiazinas se excretan en la leche materna.

Contraindicaciones:

La flufenazina está contraindicada en pacientes con antecedentes de hipersensibilidad a los ingredientes activos o inactivos. Debe tenerse cuidado en pacientes con historia de hipersensibilidad a otras fenotiazinas, ya que puede ocurrir sensibilidad cruzada.

Igual que otras fenotiazinas, la flufenazina está contraindicada en pacientes en que se sospecha o hay evidencia de daño cerebral subcortical, en pacientes que reciben dosis elevadas de agentes que deprimen el sistema nervioso central (alcohol, barbitúricos, narcóticos, hipnóticos, etc.) y en estados comatosos o de severa depresión. La flufenazina no debe utilizarse en pacientes con discrasias sanguíneas o daño hepático.

Advertencias:

Disquinesia tardía: Es un síndrome que consiste en movimientos disquinéticos, involuntarios, potencialmente irreversibles, que se pueden presentar en pacientes tratados con medicamentos neurolépticos (antipsicóticos), incluyendo la flufenazina. Aún cuando este síndrome parece ser más frecuente en la edad avanzada, especialmente en mujeres, no se puede predecir cuáles pacientes de los que reciben tratamiento neuroléptico van a desarrollar este síndrome.

Se desconoce la razón por la cual los medicamentos neurolépticos difieren en su potencial para ocasionar disquinesia tardía.

Se cree que la duración del tratamiento y la dosis acumulada, son responsables del desarrollo del síndrome y de su irreversibilidad. Sin embargo puede aparecer, aunque con menos frecuencia, después de periodos de tratamiento relativamente cortos y con dosis bajas. No se conoce el tratamiento para casos establecidos de disquinesia tardía aún cuando puede remitir parcial o completamente, si se suspende el tratamiento neuroléptico; sin embargo éste por sí mismo, puede suprimir (o suprimir parcialmente) los signos y síntomas del síndrome y por lo tanto posiblemente enmascarar un proceso patológico subyacente. Tomando en cuenta estas consideraciones, los neurolépticos deben utilizarse en tal forma que se minimice la frecuencia de la disquinesia tardía. El tratamiento neuroléptico crónico debe reservarse a pacientes que tengan una enfermedad crónica que:

  • Se sabe responde a tratamiento neuroléptico.
  • Cuando no se disponga de otro tratamiento igualmente efectivo pero menos dañino.

En pacientes que requieren tratamiento crónico, se debe escoger el tratamiento más corto y con menor dosis que proporcione un resultado satisfactorio. Se debe valorar periódicamente la necesidad de tratamiento continuo.

Si los signos y síntomas de la disquinesia tardía aparecen en pacientes que reciben neurolépticos, hay que considerar la suspensión del tratamiento. Sin embargo, hay pacientes que necesitan este tratamiento aún con la existencia de este síndrome.

Síndrome neuroléptico maligno (hipertermia con alteraciones extrapiramidales y autonómicas; hiperpirexia inducida por neurolépticos).

Se ha reportado un complejo de síntomas en ocasiones fatal conocido como síndrome neuroléptico maligno (SNM) en asociación con drogas antipsicóticas.

Las manifestaciones clínicas son: Hiperpirexia, rigidez muscular, estado mental alterado y evidencia de inestabilidad autónoma (pulso y presión arterial irregulares, taquicardia, diaforesis y arritmias cardiacas).

El diagnóstico en estos pacientes es complicado; para llegar a él, es importante identificar los casos en los que la presentación clínica incluye a una enfermedad seria (por ejemplo, neumonía, infección sistémica, etc.) y un síndrome extrapiramidal no tratado o tratado inadecuadamente. Otras consideraciones importantes en el diagnóstico diferencial incluyen toxicidad anticolinérgica central, choque por calor, fiebre por drogas y patología primaria del SNC.

El manejo del SNM incluye:

  • Suspensión inmediata de los medicamentos antipsicóticos y otros medicamentos no esenciales.
  • Tratamiento sintomático intenso y monitoreo médico.
  • Tratamiento de cualquier problema médico concomitante. No hay acuerdo general para el tratamiento médico específico farmacológico del SNM.

Si un paciente requiere tratamiento antipsicótico después de que se recuperarse de un SNM, se debe considerar cuidadosamente la reinstalación del tratamiento. Se han reportado recurrencias del SNM por lo que el paciente deberá ser vigilar estrechamente.

Otras advertencias: El uso de este medicamento puede alterar las facultades físicas y mentales que se requieren para manejar autos o para operar maquinaria pesada, particularmente durante los primeros días de tratamiento. Puede ocurrir potenciación de los efectos del alcohol con el uso de este medicamento.

Precauciones: Por la posibilidad de sensibilidad cruzada, el decanoato de flufenazina se debe usar con precaución en pacientes que han desarrollado ictericia colestática, dermatosis u otras reacciones alérgicas con derivados fenotiazínicos. Los pacientes psicóticos que reciben grandes dosis de fenotiazinas, y que van a someterse a cirugía, deberán vigilarse por la posibilidad de hipotensión. Más aún, se debe recordar que pueden ser necesario las dosis de anestésicos o de depresores del SNC. Los efectos de la atropina se pueden potencializar en algunos pacientes que reciben flufenazina debido a los efectos anticolinérgicos aditivos de estos medicamentos.

El decanoato de flufenazina se debe utilizar con cuidado en pacientes expuestos al calor extremo o a insecticidas fosforados. La preparación deberá usarse con precaución en pacientes con antecedentes de convulsiones (ya que han ocurrido convulsiones tipo gran mal en pacientes que reciben flufenazina), y en pacientes con insuficiencia mitral u otras enfermedades cardiovasculares o feocromocitoma. Se debe recordar que los pacientes con tratamiento prolongado tienen la posibilidad de daño hepático, retinopatía pigmentaria, depósitos en la córnea y en el cristalino y desarrollo de disquinesia irreversible.

Como con cualquier fenotiazina, el médico debe estar pendiente del posible desarrollo de “neumonías silenciosas” en pacientes en tratamiento con decanoato de flufenazina.

Los neurolépticos elevan la prolactina. La elevación persiste durante el tratamiento crónico. Los cultivos de tejidos indican que aproximadamente un tercio del cáncer de mama en humanos son prolactino dependientes in vitro, un factor de potencial importancia si se contempla la prescripción de estas drogas en pacientes con cáncer de mama detectado previamente.

Aunque se han reportado alteraciones tales como galactorrea, amenorrea, ginecomastia e impotencia el significado clínico de niveles altos de prolactina se desconoce en la mayoría de los pacientes. Se ha encontrado un aumento en las neoplasias mamarias en roedores, después de administración crónica de neurolépticos. No hay estudios clínicos o epidemiológicos a la fecha, que hayan mostrado relación entre administración crónica de estas drogas y tumorogénesis mamaria; la evidencia disponible se considera muy limitada hasta ahora para ser concluyente.

Uso en niños: SIQUALINE no está indicado en niños menores de 12 años.

Uso en ancianos: Los agentes antipsicóticos deben usarse con cuidado en ancianos (> 60 años) ya que estos pacientes tienen mayor posibilidad de efectos indeseables, tal vez debido a diferencias en factores farmacodinámicos. Los antipsicóticos deberían utilizarse en ancianos que presentan síntomas psicóticos tales como alucinaciones. La mayoría de personas de edad avanzada requieren dosis menores (1/4 a 1/3 de las empleadas en adultos jóvenes). Puesto que los ancianos son más susceptibles a presentar hipotensión, deben vigilarse cuidadosamente. La respuesta al medicamento debe ser valorada periódicamente para ajustar la dosis. Si es necesario administrar dosis mayores, el incremento debe hacerse en forma gradual.

Restricciones de uso durante el embarazo y la lact

La seguridad del uso de este medicamento durante el embarazo no se ha establecido. Por lo tanto, deben valorarse los posibles riesgos y los beneficios potenciales cuando se administre este medicamento a mujeres embarazadas.

Reacciones secundarias y adversas:

Sistema nervioso central: Los efectos adversos más frecuentes reportados con compuestos fenotiazínicos son síntomas extrapiramidales que incluyen al pseudoparkinsonismo, distonía, disquinesia, acatisia, crisis oculogíricas, opistótonos e hiperreflexia. Se ha reportado rigidez muscular algunas veces acompañada de hipertermia. A menudo los síntomas extrapiramidales son reversibles, sin embargo pueden ser persistentes. Con cualquier derivado fenotiazínico, la incidencia y severidad de tales reacciones dependen más de la sensibilidad individual del paciente que de otros factores, pero la dosis y la edad también son determinantes.

Las reacciones extrapiramidales pueden ser alarmantes, por lo que es necesario informar y tranquilizar al paciente. Estas reacciones pueden controlarse habitualmente con la administración de medicamentos anticolinérgicos o antiparkinsonianos (como el mesilato de bentropina), y reducción de la dosis.

Diquinesia tardía: El síndrome se caracteriza por movimientos coreoatetoides involuntarios que involucran a la lengua, cara, boca, labios o mandíbula (por ejemplo, protrusión de la lengua, mejillas infladas, boca fruncida, movimientos de masticación), tronco y extremidades. La severidad del síndrome y el grado de alteración producida varía ampliamente. El síndrome puede hacerse aparente clínicamente durante el tratamiento, al reducir la dosis, o al suspender el tratamiento. La detección temprana de la disquinesia tardía es importante. Para aumentar la probabilidad de detectar el síndrome lo más temprano posible la dosis del neuroléptico debe reducirse periódicamente (si es clínicamente posible) vigilando al paciente para detectar signos de este trastorno.

Esta maniobra es crítica ya que los neurolépticos pueden enmascarar los signos del síndrome.

Otros efectos en el SNC: Puede ocurrir el síndrome neuroléptico maligno (SNM) en pacientes con terapia neuroléptico. Puede ocurrir también con el SNM, leucocitosis, elevación de la CPK, anormalidades de la función hepática e insuficiencia renal aguda. Puede presentarse somnolencia y letargia. Los derivados fenotiazínicos pueden producir inquietud, excitación o pesadillas en algunos pacientes. Pueden ocurrir alteraciones electroencefalográficas o en las proteínas del líquido cefaloraquídeo; muy raras veces puede haber edema cerebral.

Sistema nervioso autónomo: Se han reportado hipertensión y fluctuaciones de la presión con la flufenazina. Rara vez se ha presentado hipotensión con la flufenazina. Sin embargo pacientes con feocromocitoma, insuficiencia vascular cerebral o renal, o deficiencia importante de la reserva cardiaca (como en la insuficiencia mitral), parecen ser particualrmente susceptibles de reacciones hipotensoras con componentes fenotiazínicos y por lo tanto deben vigilarse de cerca si se administra el medicamento. Si hay hipotensión severa, se deben instituir inmediatamente medidas de soporte incluyendo el uso de vasopresores intravenosos. La inyección de bitartrato de levarterenol es la droga de elección para este propósito; no se debe usar la epinefrina ya que los fenotiazínicos revierten su acción ocasionando una reducción adicional de la presión sanguínea. Pueden ocurrir reacciones autonómicas como nausea y pérdida del apetito, salivación, poliuria, sudoración, boca seca, cefalea y constipación. Los efectos autonómicos se pueden controlar habitualmente al reducir la dosis o al descontinuarla temporalmente.

En algunos pacientes las fenotiazinas pueden causar visión borrosa, glaucoma, parálisis vesical, impacto fecal, íleo paralítico, taquicardia o congestión nasal.

Metabólicos y endocrinos: En algunos pacientes en tratamiento con fenotiazinas puede haber cambio del peso, edema periférico, lactación anormal, ginecomastia, menstruación irregular, resultados falsos en las pruebas del embarazo, impotencia en los hombres y aumento en la libido en la mujer.

Reacciones alérgicas: Se han reportado con derivados fenotiazínicos alteraciones en la piel como prurito, eritema, urticaria, seborrea, fotosensibilidad, eczema y dermatitis exfoliativa. La posibilidad de reacciones anafilácticas en algunos pacientes debe tenerse en cuenta. Raras veces puede presentarse asma, edema laríngeo y edema angioneurótico.

Hematológicos: Es necesario hacer biometrías hemáticas durante el tratamiento con fenotiazinas, ya que pueden ocurrir discrasias sanguíneas incluyendo leucopenia, agranulocitosis, púrpura trombocitopénica y no trombocitopénica, eosinofilia, y pancitopenia. Además si hay alguna enfermedad de la boca, encías o garganta o cualquier síntoma de infección del tracto respiratorio superior y una cuenta leucocitaria confirma depresión celular, se debe suspender el tratamiento y establecer las medidas apropiadas inmediatamente.

Hepáticas: Se puede encontrar daño hepático el cual se manifiesta por ictericia colestática, particularmente durante los primeros meses de tratatamiento; si esto ocurre, el tratamiento deberá suspenderse. Se han reportado alteraciones de las pruebas de función hepática en pacientes que reciben flufenazina que no han tenido evidencia daño hepático.

Otros: Se ha reportado muerte súbita no esperada ni explicada en pacientes psicóticos hospitalizados que estaban recibiendo fenotiazinas. Puede haber factores predisponentes tales como daño cerebral previo o crisis convulsivas; por lo tanto no se deben utilizar grandes dosis en pacientes con antecedentes de crisis convulsivas. Otras reacciones poco frecuentes incluyen un síndrome parecido al lupus eritematosos sistémico, y alteraciones electro cardiográficas; con el uso a largo plazo se han presentado pigmentación de la piel y opacidades corneales y del cristalino.

Interacciones medicamentosas y de otro genero:

Debe tenerse en cuenta que las fenotiazinas pueden:
  • Aumentar la depresión del sistema nervioso central producida por agentes tales como alcohol, hipnóticos, sedantes y analgésicos potentes.
  • Antagonizar la acción de la adrenalina y otros agentes simpaticomiméticos, y revertir los efectos antihipertensivos de los agentes bloqueadores adrenérgicos como la guanetidina y la clonidina.
  • Alterar: El efecto antiparkinsoniano de la L-dopa.
    El efecto de los anticonvulsivantes.
    El metabolismo de los antidepresivos tricíclicos.
    El control de la diabetes.
  • Aumentar el efecto de los anticoagulantes.
  • Interactuar con el litio.

Alteraciones en los resultados de pruebas de labor

Biometría hemática: Leucopenia, agranulocitosis, púrpura trombocitopénica y no trombocitopénica, eosinofilia y pancitopenia.

Alteración en las pruebas de función hepática.

Precauciones en relacion con efectos de carcinogen

No hay estudios controlados acerca de la carcinogénesis, mutagénesis, teratogénesis y efectos sobre la fertilidad.

Dosis y via de administracion:

Nota: La dosis óptima del medicamento y la frecuencia de su administración deben determinarse en cada paciente, ya que los requerimientos varían de acuerdo a las circunstancias clínicas y a la respuesta al medicamento.

El SIQUALINE* puede administrarse intramuscular o subcutáneo. Se debe utilizar una jeringa seca con una aguja de cuando menos el No. 21. El utilizar una jeringa húmeda puede volver la solución turbia.

Trastornos psicóticos: Pacientes adultos.

Pacientes con agitación severa: Estos pacientes pueden tratarse inicialmente con un compuesto fenotiazínico de acción rápida, como el clorhidrato de flufenazina. Cuando los síntomas agudos han cedido, puede administrarse 25 mg (1 ml) de SIQUALINE. Las dosis subsecuentes se ajustarán de acuerdo a los requerimientos.

Dosis inicial: En la mayoría de los pacientes se puede iniciar con 12.5 o 25 mg (0.5 a 1 ml). Las dosis subsecuentes y el intervalo entre las inyecciones se determinan de acuerdo a la respuesta del paciente.

Dosis de mantenimiento: Una inyección puede ser eficaz para controlar los síntomas esquizofrénicos hasta 4 semanas o más.

La respuesta a una inyección puede durar hasta 6 semanas en algunos pacientes. La dosis no debe exceder de 100 mg.

Si se requieren dosis mayores de 50 mg, se deben aumentar gradualmente, con incrementos de 12.5 mg.

Pacientes geriátricos: Dosis más bajas (1/4 a 1/3 de las empleadas en adultos jóvenes) pueden ser suficientes en la mayoría de pacientes de edad avanzada.

Puede ser aconsejable que en los pacientes que no han recibido fenotiazinas, se inicie con flufenazina de acción corta (clorhidrato de flufenazina) antes de administrar SIQUALINE, para determinar la respuesta del paciente a la flufenazina y establecer la dosis adecuada.

Conversión a partir de flufenazina de acción corta: No hay una fórmula exacta para pasar de las presentaciones de acción corta al SIQUALINE; sin embargo, en un estudio multicéntrico, en pacientes que recibían 5 a 60 mg de clorhidrato de flufenazina diariamente por vía oral, se encontró que 20 mg de clorhidrato de flufenazina equivalen a 25 mg (1 ml) de SIQUALINE cada 3 semanas.

Esto representa un índice de conversión aproximado de 0.5 ml de SIQUALINE cada 3 semanas, por cada 10 mg de clorhidrato de flufenazina diario.

Pacientes de “alto riesgo”: En los pacientes con antecedentes de hipersensibilidad a las fenotiazinas, o con enfermedades que predisponen a reacciones adversas, el tratamiento puede iniciarse cuidadosamente con clorhidrato de flufenazina oral o parenteral.

Cuando el efecto farmacológico de una dosis adecuada se ha obtenido, se puede administrar una dosis equivalente de SIQUALINE. Las dosis subsecuentes se ajustan de acuerdo a la respuesta del paciente.

MANIFESTACIONES Y MANEJO DE LA SOBREDOSIFICACION O INGESTA ACCIDENTAL:

En general los síntomas de sobredosificación son la extension de los efectos farmacológicos y de los efectos secundarios conocidos; los más prominentes son: reacciones extrapiramidales severas, hipotensión y sedación.

La depresión del SNC puede progresar a coma con arreflexia. En la intoxicación leve se presenta inquietud, confusión y excitación. El medicamento debe suspenderse y los síntomas de sobredosis manejarse con tratamiento de sostén. Si ocurre hipotensión severa deben instituirse de inmediato medidas de apoyo que incluyen el uso de medicamentos vasopresores por vía intravenosa. El bitartrato de levarterenol es el agente más adecuado para este propósito; no debe usarse epinefrina, ya que los derivados fenotiazínicos revierten su acción, lo cual provoca una mayor descenso en la presión arterial. En caso de reacciones extrapiramidales severas, deben administrarse medicamentos antiparkinsonianos y continuar su administración durante varias semanas.

Estos medicamentos deben disminuirse gradualmente para evitar un efecto de rebote de síntomas extrapiramidales. La experiencia disponible, que es limitada, muestra que las fenotiazinas no son dializables.

Presentaciones:

Frasco ámpula de 1 ml.

Recomendaciones sobre almacenamiento:

Almacenar a temperatura entre 15 y 30°C. Evitar congelación y calor excesivo. Protéjase de la luz.

Leyendas de proteccion:

Su venta requiere receta médica, que se surtirá hasta por 3 veces. Manténgase fuera del alcance de los niños. Literatura exclusiva para médicos.

Laboratorio y direccion:

Hecho en México por: BRISTOL-MYERS SQUIBB DE MEXICO, S. de R.L. de C.V.
(DIVISION SQUIBB)
Av. Revolución No. 1267
Colonia Tlacopac
01040 México, D.F.
* Marca registrada

:

Reg. Núm. 77529, SSA
IEA-23043/94/IPPA
Definiciones médicas / Glosario
  1. ECZEMA, Es la inflamación de la piel el término se usa como sinónimo de eczema. Aparece sobre todo en las áreas expuestas al sol con mayor frecuencia en las manos o en la cara.
  2. EDEMA, Es la tumefacción de los tejidos debido a un aumento del líquido existente en ellos y suele aparecer tras una lesión.
  3. ICTERICIA, Es la pigmentación amarilla del blanco de los ojos o de la piel, provocada por un exceso de bilirrubina en la sangre que acaba depositándose en los tejidos.
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