Criam Tabletas De Liberacion Prolongada
Para qué sirve Criam Tabletas De Liberacion Prolongada , efectos secundarios y cómo tomar el medicamento.
Advertencia! la información que ofrecemos es orientativa y no sustituye en ningún caso la de su médico u otro profesional de la salud..
- Denominacion generica:
- Forma farmaceutica y formulacion:
- Indicaciones terapeuticas:
- Farmacocinetica y farmacodinamia en humanos:
- Contraindicaciones:
- Precauciones generales:
- Restricciones de uso durante el embarazo y la lact
- Reacciones secundarias y adversas:
- Interacciones medicamentosas y de otro genero:
- Alteraciones en los resultados de pruebas de labor
- Precauciones en relacion con efectos de carcinogen
- Dosis y via de administracion:
- Manifestaciones y manejo de la sobreCómo tomar o i
- Presentaciones:
- Recomendaciones sobre almacenamiento:
- Leyendas de proteccion:
- Laboratorio y direccion:
CRIAM
Tratamiento de la epilepsia, el trastorno bipolar y la migraña
PSICOFARMA, S.A. de C.V.
Denominacion generica:
Valproato de magnesio.
Forma farmaceutica y formulacion:
Cada tableta contiene:
Valproato de magnesio …… 200, 400 y 600 mg
Excipiente, cbp ……………. 1 tableta
Indicaciones terapeuticas:
CRIAM® es un medicamento cuyo principio activo es valproato de magnesio y su formulación es de liberación prolongada, este fármaco presenta un amplio espectro terapéutico anticonvulsivante. CRIAM® está indicado ya sea en monoterapia o combinado con otros fármacos anticonvulsivantes para el tratamiento de las epilepsias parciales, complejas y generalizadas tales como: ausencias simples y complejas, crisis tónico clónicas, atónicas, mioclonías y otros tipos de síndromes epilépticos como: síndrome de West, síndrome de Lennox-Gastaut, síndrome de Janz (epilepsia mioclónica juvenil), síndrome de Dravet (epilepsia mioclónica severa).
CRIAM® también es eficaz en el tratamiento profiláctico de la migraña así como en los episodios de manía del trastorno afectivo bipolar y en combinación con antipsicóticos en el tratamiento de la esquizofrenia refractaria al empleo de monoterapia. CRIAM® es empleado en pacientes con trastorno por déficit de atención con o sin hiperactividad (TDA/H) para el control de las conductas agresivas. CRIAM® está indicado también para disminuir la sintomatología en el síndrome de abstinencia de sustancias.
Farmacocinetica y farmacodinamia en humanos:
CRIAM® está desarrollado y diseñado con una forma farmacéutica de liberación prolongada que ofrece un efecto sostenido y con menores fluctuaciones terapéuticas en el control de la epilepsia. CRIAM® por sus diversas propiedades farmacológicas ofrece cualidades que lo distinguen y hacen diferente de otros antiepilépticos. Presenta un efecto antianóxico a nivel periférico que se opone a la inactivación del metabolismo muscular y a la apnea provocadas por la convulsión. Por otra parte no tiene efecto depresor sobre el sistema nervioso central ya que no presenta en su estructura química radicales ureido.
Absorción: CRIAM® está integrado en una matriz polimérica que envuelve las partículas del fármaco permitiendo la liberación lenta y constante del principio activo.
Después de la administración por oral de valproato de magnesio de liberación prolongada, el fármaco es rápidamente convertido en ácido varoico (ácido N-dipropilacético) en el estómago y absorbido casi completamente por el tracto gastrointestinal. La presencia de alimentos no altera su tasa final de absorción.
La biodisponibilidad de valproato es cercana al 100%. El valproato de magnesio de liberación prolongada alcanza su máxima concentración plasmática (Cmáx.) en un plazo aproximado de 7 a 14 horas.
La vida media de valproato en sangre después de una dosis única es de 8 a 16 horas en los adultos sanos aunque existen estudios en los que se ha observado una vida media de 15 y 17 horas. La vida media puede variar con la edad y sobre todo se reduce en aquellos pacientes que están recibiendo más de un medicamento.
El valproato de magnesio de liberación prolongada ofrece concentraciones plasmáticas bajas, lo cual se traduce en menores fluctuaciones de los niveles pico-valle séricos, que garantizan su acción terapéutica sostenida durante los intervalos entre una y otra dosis.
Después de una dosis única, los niveles séricos máximos de valproato de magnesio (expresados en mcg/ml) correspondieron a 6 ó 7 veces la dosis ingerida (expresada en mg/kg). Se han observado algunas variaciones circadianas en los niveles sanguíneos del valproato de magnesio, que pueden explicarse por la existencia de una circulación enterohepática del medicamento.
Distribución: La distribución del valproato de magnesio se limita primeramente a líquido extracelular y a la circulación. Su incorporación a los tejidos es muy limitada. El volumen aparente de distribución del valproato es entre 0.1 y 0.4 lt./kg. El líquido cefalorraquídeo en el hombre contiene niveles de valproato de magnesio similares a los niveles hemáticos, mientras que los niveles en tejido cerebral varían entre 6.8 y 27.9% de los niveles plasmáticos.
El valproato de magnesio disminuye de la sangre de una manera biexponencial indicando un modelo de dos compartimientos farmacocinéticos. La vida media terminal parece ser de 15 a 17 horas y es independiente de la dosis administrada. Se ha encontrado que el valproato de magnesio se une en cerca de 90% a las proteínas plasmáticas, principalmente a la albúmina. La fracción unida a ? y ?-globulinas es pequeña. El valproato de magnesio se une a dos sitios de saturación de proteínas, uno de afinidad alta y otro de afinidad baja.
La unión a las proteínas del valproato de magnesio se traduce en una retención del medicamento por más tiempo y su inactivación temporal. Solamente el valproato de magnesio libre tiene actividad farmacológica, puesto que solamente la forma libre se difunde en el cerebro. Ciertos factores pueden influir el porcentaje de unión del medicamento, como la presencia de niveles reducidos de albúmina en la sangre, lo que ocurre por ejemplo en los recién nacidos con insuficiencia hepática. Es recomendable llevar a cabo un análisis de niveles de albúmina sanguínea antes de comenzar el tratamiento antiepiléptico con valproato. El índice de concentración del fármaco en leche materna es de 0.01.
Metabolismo: El valproato de magnesio es un ácido graso que se ve influido en su metabolismo por varios factores como la edad, la dieta, la posología y la presencia de otros medicamentos. Es metabolizado casi por completo y su biotransformación se realiza como en la mayoría de los fármacos, en el hepatocito después de reabsorberse en el túbulo renal.
Este fármaco es metabolizados a través de dos fases: la oxidación, en la cual su estructura se hace más polar e hidrosoluble, y la glucuronidación.
La oxidación se efectúa en las mitocondrias. Cuando la dosis es baja (5 mg/kg/día) se realiza la ?-oxidación; la w-oxidación son vías alternativas de menor importancia.
Se conocen varios metabolitos (diecisiete) del valproato de magnesio que han sido identificados por cromatografía de gas-líquido y por espectrometría de masa. Los principales son el glucurónido de valproato, el ácido-2-propil-2-pentanoico y 2-propil-3-exo-pentanoico, que tiene actividad equivalente a 15% de la del ácido varoico.
La glucuronidación es la principal vía metabólica del valproato. Se realiza en el retículo endoplásmico.
Excreción: Una vez conjugado el valproato de magnesio se excreta rápidamente por la orina. Cerca de 70% de la dosis administrada (1 a 3% inalterada) se elimina por esta vía.
Existe una considerable evidencia de los múltiples y complejos mecanismos de acción que ofrece el valproato de magnesio mismo que pueden ser de importancia al intervenir en los procesos fisiopatológicos de diversos trastornos neurológicos y psiquiátricos. Estudios recientes han demostrado que el valproato es más eficaz cuando se administra bajo la forma magnésica y presenta menos efectos secundarios. El ión magnesio produce acciones importantes sobre el sistema nervioso central, por lo que al ser adicionado al acido varoico y formar el valproato de magnesio, se obtienen resultados que mejoran los efectos del fármaco sobre la excitabilidad de la membrana neuronal como son: Atraviesa mejor la barrera hematoencefálica. No interfiere en el intercambio Na+/K+. Facilita la modulación de la conductancia potásica por el componente activo del medicamento.
En el tratamiento de la epilepsia el valproato de magnesio de liberación prolongada está considerado como un antiepiléptico mayor, es decir, tiene un espectro antiepiléptico amplio que permite su utilización en el tratamiento de crisis generalizadas y crisis parciales debido a que logra una disminución neta del umbral convulsivo.
El valproato de magnesio ha mostrado, a través de su empleo, un efecto ansiolítico debido a su acción gabaérgica. Actúa sobre la neurona de un modo directo al incrementar y reforzar el efecto inhibitorio del GABA en los receptores postsinápticos a través de un aumento de la síntesis o una disminución de la degradación de este neurotransmisor por medio de las siguientes acciones:
- Aumenta los niveles GABA en el cerebro por medio de la acción inhibidora del valproato de magnesio sobre las enzimas que degradan al neurotransmisor la GABA transaminasa y la semi aldehído succínico deshidrogenasa.
- Activa la glutamato descarboxilasa, enzima encargada de la síntesis de GABA a partir de ácido glutámico.
- Disminuye la neurotransmisión excitatoria, reduciendo la transmisión mediada por aminoácidos excitatorios como aspartato, glutamato y el ácido ? hidroxibutírico.
- Atenúa la excitación neuronal mediada por la activación de los receptores NMDA del glutamato.
- Inhibe y reduce la conductancia los canales de Ca++ tipo T en las neuronas del tálamo.
- Interactúa con el paso iónico transmembrana, modificando el potencial de reposo de la membrana neuronal, alterando sus patrones de excitación y/o refractariedad al estabilizar la conductancia de los canales y de la bomba sodio/potasio.
El valproato mejora el metabolismo cerebral al favorecer la expresión de factores protectores tróficos como el BDNF (factor neurotrófico derivado del cerebro) y proteínas antiapoptóticas como la BCL-2 por otra parte el valproato bloquea la presencia de factores atróficos como la GSK-3? (glucógeno quininógeno sintetasa) esta es una quininasa cuya sobreexpresión potencia determinados procesos apoptóticos, como resultado de la participación del valproato en estos procesos, se ha confirmado una mejoría en la fisiología, metabolismo y plasticidad neuronal (neurogénesis).
El mecanismo exacto de acción por el cual valproato actúa como profiláctico de la migraña aún no está bien establecido. El efecto GABA-érgico y su acción sobre los receptores GABA, incluyendo aquéllos del rafe dorsal, provoca una disminución de la descarga de las neuronas serotoninérgicas, previniendo la vasodilatación observada en las crisis de migraña. Los efectos en la profilaxis de la migraña también están relacionados con la reducción de la hiperexcitabilidad ocasionada por el glutamato. Estudios recientes han demostrado que existe disminución de magnesio en plasma, saliva y eritrocitos en pacientes con migraña.
Esta disminución del ion Mg juega un papel importante en los mecanismos fisiopatológicos, induciendo las crisis migrañosas por depresión de la onda de propagación cortical, disminución de la neurotransmisión central e hiperagregación esta disminución del ión es compensada con un fármaco como el valproato de magnesio.
Contraindicaciones:
CRIAM® no debe administrarse en pacientes con hipersensibilidad al principio activo, así como en pacientes con enfermedad o disfunción hepática. Su uso durante el embarazo, especialmente durante el primer trimestre, y la lactancia esta contraindicado.
Precauciones generales:
La asociación con otros antiepilépticos requerirá ajustar las dosis de cada uno de los medicamentos empleados para evitar la aparición de efectos indeseables. En caso de asociarse con fenobarbital, deberá reducirse la dosis del barbitúrico (no debe exceder de 200 mg/día) debido a que el valproato de magnesio potencializa la acción del barbitúrico (ver Interacciones).
En vista de que se han reportado algunos casos de hepatotoxicidad, se sugiere realizar pruebas de función hepática antes de iniciar el tratamiento y a cada dos meses de iniciado. La incidencia de hepatotoxicidad usualmente se han observado durante los primeros seis meses de tratamiento y disminuye considerablemente con la edad. La dosis del medicamento deberá reducirse inmediatamente en presencia de disfunción hepática significativa, ya sea sospechada o aparente. La hepatotoxicidad fatal o severa puede ser precedida por síntomas no específicos, como malestar, debilidad, letargo, edema facial, anorexia y vómito.
En algunos casos, la disfunción hepática ha progresado a pesar de descontinuarse el medicamento, por lo que el valproato no ha sido la causa.
Se debe considerar la fuerte unión del valproato de magnesio a las proteínas plasmáticas, debido que puede desplazar a otros fármacos que tienen la misma propiedad y deberá tomarse en cuenta en pacientes con alteraciones hepáticas, hematológicas y en diabéticos.
Se han reportado casos de pancreatitis en pacientes que han recibido valproato. En algunos de los casos se han descrito hemorragias, con progresión rápida desde los síntomas iniciales a la muerte.
Los pacientes y familiares deben ser advertidos acerca de la aparición de dolor abdominal, náusea, vómito y/o anorexia como síntomas de pancreatitis, lo cual requiere una pronta evaluación médica. Si se diagnostica pancreatitis, el valproato debe ser descontinuado.
La administración conjunta de valproato de magnesio con otros anticonvulsionantes en pacientes, puede producir niveles séricos máximos más rápidamente que en voluntarios sanos (ver Interacciones).
Si se agrega valproato de magnesio a la carbamazepina, se ha observado sedación, diplopía y somnolencia (ver Interacciones).
Así mismo, en algunos pacientes epilépticos puede ocurrir una pérdida del control de las crisis debido a que la vida media se acorta (seis a ocho horas) en los pacientes tratados simultáneamente con otros agentes antiepilépticos tradicionales, por lo cual los pacientes deben ser vigilados estrechamente por la posible aparición de manifestaciones clínicas del padecimiento.
Restricciones de uso durante el embarazo y la lact
Clasificado como categoría D por la FDA.
No se use durante el embarazo, especialmente durante el primer trimestre de embarazo.
La administración conjunta de valproato de magnesio y fenitoína durante el embarazo, puede aumentar la incidencia de malformaciones congénitas descritas en el síndrome fetohidantoína: paladar hendido, labio leporino, malformaciones cardiacas, hipoplasia digital y displasia de uñas.
Las concentraciones registradas de valproato en la leche materna son de 0.01% por lo cual se recomienda valorar el riesgo-beneficio para el lactante o suspender la lactancia.
Reacciones secundarias y adversas:
Los efectos adversos se deben al ácido varoico y no al magnesio, por lo que son comparables a los observados con el empleo de ácido varoico o valproato sódico. Como el fármaco frecuentemente se combina con otros anticonvulsivantes, difícilmente es posible determinar el origen de algunas reacciones secundarias.
Frecuentes (>5%) Poco frecuentes (>1%) Raras (
Gastrointestinales (>5%): Se presentan generalmente al inicio del
tratamiento y, rara vez, requieren la suspensión del tratamiento: náusea, vómito, diarrea, cólico abdominal,
constipación, anorexia, pérdida o aumento de peso y incremento del apetito. Sistema nervioso central (> 5%):
Sedación (más común en tratamiento combinado), ataxia, cefalea, nistagmo, diplopía, temblor, disartria, mareo
e incoordinación. Dermatológicos (> 5%): Pérdida transitoria del cabello, rash cutáneo, fotosensibilidad,
prurito. Dermatológicos (< 1%): Eritema multiforme, síndrome de Stevens-Johnson. Psiquiátricas (> 5%):
Depresión, agresividad, psicosis, hiperactividad. Hepáticas(< 1%): Elevaciones menores de las transaminasas
(relacionadas con la dosis): TGO, TGP y DHL pueden presentarse alteraciones en las pruebas de laboratorio que
incluyen aumento de las bilirrubinas y cambios anormales en otras pruebas de función hepática. Hematológicas
(< 1%): trombocitopenia, alteración de la agregación plaquetaria, aumento en el tiempo de sangrado, petequias,
hematomas, hemorragias, linfocitosis, hipofibrinogenemia; leucopenia, eosinofilia, anemia y supresión de la
médula ósea. Endocrinas (