Vitaminas para la ciática
La ciática es una enfermedad que afecta esencialmente al nervio ciático que se extiende desde la columna vertebral hasta los pies. Al ser este nervio el más largo y ancho del cuerpo humano, se encuentra más vulnerable a la presión o daño, por lo que este trastorno nervioso resulta muy común en nuestros días.
La ciática suele sufrirse generalmente durante el periodo del embarazo. En este caso de debe a la compresión de algunas raíces del nervio ciático por el crecimiento del feto. No obstante, este nervio también puede verse afectado por otros factores. El punto común, sin importar la causa, es: un fuerte dolor que se extiende desde la región lumbar hasta el pie.
Para su prevención y tratamiento los especialistas recomiendan fortalecer el nervio ciático mediante el consumo de vitaminas presentes en los más diversos alimentos de la dieta cotidiana. Entre las vitaminas para la ciática se encuentran fundamentalmente las vitaminas del complejo B y en particular la B1, la B6 y la B12, que mejoran las funciones musculares y nerviosas.
La B1 o Tiamina ocupa un papel esencial en el sistema nervioso pues favorece la acción de los mediadores químicos necesarios para transmitir el impulso nervioso. Esta vitamina puede hallarse en los vegetales como las legumbres, en la levadura de cerveza y en los cereales integrales. Se encuentra en menor cantidad en las frutas y verduras; así como en los tejidos animales y sus derivados como el pescado, la carne de cerdo, los huevos, la leche y el hígado.
Por otra parte, la vitamina B6 o Piridoxina presenta un marcado efecto analgésico sobre el sistema nervioso, sobre todo cuando se combina con la vitamina B1. La B6 se encuentra en la mayoría de los alimentos pero sobre todo en los cereales, las legumbres, las nueces, los plátanos y el hígado.
En el caso de la vitamina B12 o Cobalamina, esta actúa igualmente sobre el sistema nervioso y puede encontrarse en forma natural sólo en los tejidos animales; fundamentalmente en el hígado y en menor grado en la carne, los huevos, la leche, el pescado y los derivados de estos alimentos.
Es válido destacar que cuando se consumen estas vitaminas de forma natural no provocamos ningún daño al organismo e incluso podemos prevenir la ciática. Sin embargo, para consumir estas vitaminas en forma de píldoras, será necesario consultar con un médico, sobre todo si se está embarazada.