Las funciones del hierro en el organismo

En este sentido, entre las funciones del hierro en nuestro organismo se destaca su tarea transportadora de oxígeno a los tejidos. Por ende, es fácil presuponer que cuando se produce un déficit de hierro nuestro metabolismo no puede funcionar adecuadamente, apareciendo la anemia ferropénica y la hemocromatosis (que en caso de no tratarse adecuadamente pueden incluso afectar la vida de quienes la padecen).
De esta manera, las personas que presentan niveles bajos de hierro suelen manifestar algunos síntomas como la debilidad, la fatiga, la palidez cutánea y de las mucosas, los mareos, los problemas gástricos, así como el dolor de cabeza y en las extremidades, la depresión y la irritabilidad. Con frecuencia pueden aparecer además dificultades para concentrarse, una disminución de la memoria y un mayor riesgo de contraer infecciones del medio ambiente.
Para evitar todas estas complicaciones los especialistas recomiendan un tratamiento complementario que nos ayude a reestablecer los niveles de hierro en el organismo. A la misma vez, normalmente indican una dieta alimenticia rica en hierro que incluya cualquier tipo de carne pero sobre todo carne de cordero, ternera e hígado, además de almejas, mejillones, ostras, pescados, legumbres, frutos secos oleaginosos, verduras y hortalizas.
Por supuesto, los especialistas también puntualizan que se debe mantener un cuidado especial con el exceso de hierro en el cuerpo ya que puede ser igualmente dañino. En estos casos aparecen enfermedades que afectan principalmente al hígado, el páncreas y otros órganos vitales. El tratamiento básico son los medicamentos que favorecen la eliminación de este mineral o realizar varias sangrías que faciliten el proceso de expulsión.