Ir al gimnasio

Resulta notable ver como fluctúa la cantidad de personas en un gimnasio a lo largo del año. Mientras que se llenan de gente en los dos meses previos al verano, se ven casi vacíos en las fiestas o durante el otoño. Sin embargo, es importante para lograr los resultados que te propones integrar al gimnasio en tu rutina diaria durante todo el año. Es por eso que aquí te damos claves para ir al gimnasio y no perder la constancia.
Para mantener la constancia es clave la motivación que tengamos. Y para ello es bueno conjugar objetivos a corto y largo plazo. No puedes (ni debes) ponerte en forma para el verano en un sólo mes. Bajar varios kilos o tonificar los músculos desde cero debería ser un objetivo a largo plazo, pero, por el contrario, ver pequeños progresos, aumentar la carga poco a poco, mejorar en un test de fuerza o resistencia o bajar de peso paulatinamente son buenos objetivos que nos ayudan a mantenernos con ganas de seguir yendo al gimnasio.
Otro aspecto importante es que debemos disfrutar del gimnasio. Es cierto que a algunas personas gusta mas y a otras menos. Y también es cierto que en muchas ocasiones no tendremos ganas de ir, ya que es difícil que querramos luego de jornadas laborales extenuantes. Pero será más fácil siempre que sepamos que disfrutaremos lo que hacemos. Puedes llevar música que te entretenga mientras te ejercitas y adaptar el plan (dentro de lo posible) a tus gustos, priorizando ciertos ejercicios antes que otros que tiren abajo tu motivación (aunque claro, algunos son muy importantes).
Una forma muy buena de asumir un compromiso es yendo junto a un compañero al gimnasio. Esto no sólo hará más amena la jornada de entrenamiento, sino que además tendremos alguien a quien no podemos dejar plantado.

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  Consejos, Ejercicio físico

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Resulta notable ver como fluctúa la cantidad de personas en un gimnasio a lo largo del año. Mientras que se llenan de gente en los dos meses previos al verano, se ven casi vacíos en las fiestas o durante el otoño. Sin embargo, es importante para lograr los resultados que te propones integrar al gimnasio en tu rutina diaria durante todo el año. Es por eso que aquí te damos claves para ir al gimnasio y no perder la constancia.
Para mantener la constancia es clave la motivación que tengamos. Y para ello es bueno conjugar objetivos a corto y largo plazo. No puedes (ni debes) ponerte en forma para el verano en un sólo mes. Bajar varios kilos o tonificar los músculos desde cero debería ser un objetivo a largo plazo, pero, por el contrario, ver pequeños progresos, aumentar la carga poco a poco, mejorar en un test de fuerza o resistencia o bajar de peso paulatinamente son buenos objetivos que nos ayudan a mantenernos con ganas de seguir yendo al gimnasio.
Otro aspecto importante es que debemos disfrutar del gimnasio. Es cierto que a algunas personas gusta mas y a otras menos. Y también es cierto que en muchas ocasiones no tendremos ganas de ir, ya que es difícil que querramos luego de jornadas laborales extenuantes. Pero será más fácil siempre que sepamos que disfrutaremos lo que hacemos. Puedes llevar música que te entretenga mientras te ejercitas y adaptar el plan (dentro de lo posible) a tus gustos, priorizando ciertos ejercicios antes que otros que tiren abajo tu motivación (aunque claro, algunos son muy importantes).
Una forma muy buena de asumir un compromiso es yendo junto a un compañero al gimnasio. Esto no sólo hará más amena la jornada de entrenamiento, sino que además tendremos alguien a quien no podemos dejar plantado.

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