Composición:
Cada comprimido contiene: Ciprofibrato 100 mg. Excipientes: Povidona K30, Almidón de Maíz, Celulosa Microcristalina pH
101, Croscarmelosa Sódica, Lauril Sulfato de Sodio, Estearato de Magnesio.
Contraindicaciones:
Pacientes que cursen con: Insuficiencia renal severa (índice de filtración glomerular (GFR) < 30 ml/min/1.73 m2
superficie corporal). Embarazo y lactancia. Por la presencia de lactosa, este medicamento está contraindicado en
pacientes con deficiencia de lactosa, galactosemia o síndrome de malabsorción de glucosa o galactosa. Daño de la
función renal o cualquier situación de hipoalbuminemia, como síndrome nefrótico, ciprofibrato puede incrementar el
riesgo de miopatía. Insuficiencia hepática severa. Se recomienda su uso con precaución en pacientes con daño
hepático, por lo que es necesaria la realización periódica de pruebas de funcionamiento hepático. El ciprofibrato
debe suspenderse inmediatamente en caso de encontrar alteraciones significativas de los niveles de transaminasas
en forma persistente o evidencia de daño hepático por colestasis. El hipotiroidismo subclínico puede ocasionar
dislipidemia secundaria, por lo que debe ser diagnosticado y corregido antes de iniciar el tratamiento, ya que el
hipotiroidismo es un factor de riesgo para el desarrollo de miopatía. Hipersensibilidad a los componentes de la
fórmula.
Propiedades:
Farmacocinética y farmacodinamia:
El mecanismo de acción del ciprofibrato en el metabolismo de lípidos ha sido descrito recientemente: desde el
descubrimiento de que los receptores peroxisosomales activadores de la proliferación (PPARs), son factores
activadores de la transcripción que pertenecen a la superfamilia de receptores hormonales nucleares, se ha
demostrado que estos regulan la activación de genes que codifican para enzimas que participan en diversos
mecanismos del metabolismo de lípidos (acil-CoA oxidasa, enoil-CoA hidratasa, hidroxiacil-CoA deshidrogenasa,
lipoproteína lipasa, etc.), incluyendo transporte, captación celular, unión intracelular, activación, anabolismo y
catabolismo (ß-oxidación peroxisosomal y mitocondrial) y almacenamiento. Diversos estudios han demostrado que
estos PPARs, se presentan en forma de 3 isotipos, denominados a, ß y g de los cuales, PPARa, regulan la
ß-oxidación en peroxisomas hepáticos y PPARg adipogénesis. El nivel de activación de los PPARs, aumenta en forma
importante mediante la interacción directa del ciprofibrato con el receptor nuclear, incrementando de la misma
manera las concentraciones de enzimas necesarias para el metabolismo de lípidos. El ciprofibrato induce la
reducción de colesterol en plasma con rangos que varían entre 15 a 30% y de triglicéridos con rangos entre 40-50%,
estas reducciones se atribuyen a la disminución de las fracciones aterogénicas de baja densidad (VLDL y LDL), por
inhibición de la biosíntesis hepática del colesterol. Asimismo, eleva los niveles séricos del colesterol HDL.
Estas 2 propiedades contribuyen a una mejor distribución del colesterol plasmático por una disminución
considerable de la siguiente relación: (VLDL+ LDL)/HDL.
Absorción y biodisponibilidad:
Los trabajos iniciales realizados por Davison y Col. (1975) indicaron que la absorción del ciprofibrato es rápida,
observándose el pico de concentración máxima plasmática a las 2 horas después de la administración. Trabajos más
recientes realizados por Ferry y Col. (1989) han confirmado que los valores de Tmáx son en el curso de 1 hora,
como lo reportado anteriormente. En investigaciones usando ciprofibrato radiomarcado con C14, se ha confirmado su
rápida absorción (Tmáx 0.7 h) y han mostrado que el medicamento se absorbe ampliamente, 80% de la dosis es
eliminada por orina. Este trabajo también demostró la biodisponibilidad absoluta del ciprofibrato, lo cual fue
confirmado por las mínimas variaciones de la Cmáx y el área bajo la curva (ABC) de la gráfica de concentración
plasmática comparando grupos y sujetos. En presencia de alimentos, ciprofibrato muestra una depresión de su
absorción de aproximadamente 17% y una prolongación de su Tmáx de 0.75 a 3 horas. No se han observado cambios en
la vida media biológica ni en el ABC. Los alimentos no alteran el estado estable de las concentraciones
plasmáticas de ciprofibrato. Ciprofibrato se enlaza a las proteínas plasmáticas, a la albúmina en 95% y a la
globulina en 25%. El volumen de distribución aparente, con una biodisponibilidad de 100%, se calcula en 11.7 ± 1.7
litros.
Eliminación:
La depuración del plasma, según una biodisponibilidad completa, se encuentra entre 1.35 y 1.55 ml/kg/h. La vida media
se ha estimado en 80 horas aproximadamente. La depuración renal es muy lenta y baja, evidenciada por menos de 5%
de la radiactividad urinaria, en estudios con radiomarcadores asociados al medicamento original, lo cual puede
explicarse por la unión de ciprofibrato a las proteínas plasmáticas.
Excreción:
La principal vía de excreción de ciprofibrato y sus conjugados es renal, con una recuperación en orina de 80 ± 2.9% de
la dosis administrada por vía oral a los 10 días. La extrapolación indica que esta vía de excreción puede alcanzar
hasta 97%. Aproximadamente, 3% de la dosis se encontró en heces, lo cual sugiere una mínima secreción del
compuesto en la bilis.
Metabolismo:
Los trabajos iniciales indicaron que el medicamento es ampliamente excretado como tal y/o en su forma
glucorónido-conjugados; juntos alcanzan 54% de la dosis a las 72 horas. Estudios posteriores demostraron que por
lo menos 75% de la excreción renal del medicamento es en forma no conjugada. Otros estudios empleando ciprofibrato
radiomarcado con C14 permitieron identificar la radiactividad remanente en la orina (2-6%), con 3 metabolitos en
concentraciones muy pequeñas.
Posología:
Oral.
Adultos:
1 comprimido de 100 mg al día. En pacientes con insuficiencia renal moderada, se recomienda utilizar una dosis de 100
mg 3 veces/semana.
Pacientes geriátricos:
Se ha recomendado la misma dosis de 100 mg, pero bajo estrecha vigilancia médica.
Efectos colaterales:
Las reacciones secundarias se presentan ocasionalmente y son moderadas; entre ellas se encuentran: Dispepsia (6%),
náusea (3-7%), diarrea (3%), cefalea, mialgia y miopatía, exantema, vértigo, impotencia y pérdida del cabello. Se
ha reportado en raras ocasiones fotosensibilidad. Estos efectos secundarios son frecuentemente transitorios y se
presentan al inicio del tratamiento. Como ocurre con otros medicamentos del grupo, se han reportado pacientes que
presentan mialgias, miopatías, incluyendo miositis y en algunos casos rabdomiólisis. La aparición de dichos
eventos musculares tiene relación con la dosis, de ahí que la dosis diaria no debe exceder de 100 mg. Se debe
advertir a los pacientes que en caso de presentar síntomas como dolor muscular, rigidez o debilidad sin causa
aparente, notifique a su médico de inmediato, para la determinación de CPK sérica, en caso de que se confirme
miopatía y que los niveles de CPK se encuentren elevados, se deberá suspender la administración del ciprofibrato.
En la mayoría de los casos la toxicidad muscular es reversible posterior a la suspensión del tratamiento. Se han
reportado casos aislados de pacientes con neumonitis y fibrosis pulmonar.
Contraindicaciones:
Pacientes que cursen con: Insuficiencia renal severa (índice de filtración glomerular (GFR) < 30 ml/min/1.73 m2
superficie corporal). Embarazo y lactancia. Por la presencia de lactosa, este medicamento está contraindicado en
pacientes con deficiencia de lactosa, galactosemia o síndrome de malabsorción de glucosa o galactosa. Daño de la
función renal o cualquier situación de hipoalbuminemia, como síndrome nefrótico, ciprofibrato puede incrementar el
riesgo de miopatía. Insuficiencia hepática severa. Se recomienda su uso con precaución en pacientes con daño
hepático, por lo que es necesaria la realización periódica de pruebas de funcionamiento hepático. El ciprofibrato
debe suspenderse inmediatamente en caso de encontrar alteraciones significativas de los niveles de transaminasas
en forma persistente o evidencia de daño hepático por colestasis. El hipotiroidismo subclínico puede ocasionar
dislipidemia secundaria, por lo que debe ser diagnosticado y corregido antes de iniciar el tratamiento, ya que el
hipotiroidismo es un factor de riesgo para el desarrollo de miopatía. Hipersensibilidad a los componentes de la
fórmula.
Precauciones:
Precauciones generales:
No deberá excederse de la dosis terapéutica recomendada. El ciprofibrato no es dializable.
Restricciones de uso durante el embarazo y la
lact
No existe evidencia de que el ciprofibrato sea teratogénico; sin embargo, en estudios realizados en especies de
animales se ha observado que el ciprofibrato, en dosis mucho mayores a las terapéuticas, puede ocasionar
teratogenicidad. Asimismo, se observó que el ciprofibrato se excretaba en la leche de las ratas lactantes. No
existe información de uso en mujeres gestantes o durante el período de lactancia.
Alteraciones en los resultados de pruebas de
labor
Se han observado pruebas de funcionamiento hepático anormales en forma ocasional, como es el caso de incrementos
transitorios de transaminasas séricas, como sucede con otros fibratos. Se sugiere llevar un control periódico de
las pruebas de funcionamiento hepático.
Precauciones en relación con efectos de carcinogén
No existe evidencia de que el ciprofibrato sea carcinogénico, teratogénico o mutagénico en humanos; sin embargo, a
nivel experimental, se ha observado en especies animales a dosis mayores a las terapéuticas, efectos tóxicos como
teratogénesis, rabdomiólisis y carcinogenicidad especialmente hepática.
Interacciones medicamentosas:
El ciprofibrato potencia los efectos de la warfarina y probablemente de otros agentes antivitamina K. En caso de
tratamiento concomitante, las dosis de los agentes antivitamina K se deben reducir de 30 a 50% y se debe realizar
un reajuste de dosis, dependiendo del tiempo de protrombina. Debido a su alta unión a proteínas plasmáticas, es
predecible la interacción con otras sustancias que tengan la misma afinidad. El ciprofibrato puede potenciar los
efectos de los hipoglucemiantes orales, aunque no existe evidencia hasta el momento de que esta interacción
pudiera causar problemas clínicos significativos. Los estrógenos pueden incrementar los niveles séricos de lípidos
y aunque se ha sugerido dicha interacción farmacodinámica, no existe a la fecha información clínica que los apoye.
Al igual que con otros fibratos, el riesgo de rabdomiólisis y mioglobulinuria puede incrementarse si el
ciprofibrato es usado en combinación con inhibidores de HMG-CoA reductasa (hidroxi-metil-glutaril-coenzima A
reductasa) u otros fibratos. Como en el caso de otros fibratos, el riesgo de rabdomiólisis y mioglobinuria puede
incrementarse si el ciprofibrato es utilizado en combinación con otro o con inhibidores de la HMG-coenzima-A
reductasa.