BLOQUEANTES NEUROMUSCULARES y VERAPAMILO
Interacciones entre BLOQUEANTES NEUROMUSCULARES y VERAPAMILO, efectos secundarios.
Advertencia! la información que ofrecemos es orientativa y no sustituye en
ningún caso la de su médico u otro profesional de la salud..
EFECTO PREVISIBLE
Posible aumento de la actividad miorrelajante. Riesgo de depresión respiratoria y apnea.
IMPORTANCIA CLÍNICA
La interacción parece tener cierta importancia clínica, no pudiendo excluirse el riesgo de depresión respiratoria. En
principio, no parece necesario evitar este tipo de asociaciones, aunque deberá ajustarse la dosis de bloqueante
neuromuscular y realizar un control especialmente minucioso de la respuesta miorrelajante. En algunos casos puede
requerirse la asistencia respiratoria.
MECANISMO DE INTERACCIÓN
Posible efecto sinérgico sobre la fibra muscular. Verapamilo puede provocar miorrelajación al bloquear la entrada de
calcio al interior celular, el cual es necesario para el proceso de contracción.
EVIDENCIAS CLÍNICAS
1-5 Algunos estudios experimentales han sugerido que verapamilo potencia el bloqueo neuromuscular de los relajantes
musculares de tipo no despolarizante, aunque por sí mismo verapamilo carece prácticamente de efectos sobre la
transmisión neuromuscular. 4 Una mujer de 66 años tratada con verapamilo experimentó un bloqueo neuromuscular
prolongado tras la administración de vecuronio, a pesar de la administración de varias dosis de neostigmina. 7
También se ha descrito la aparición de largos episodios de bloqueo neuromuscular tras la administración de
pancuronio y tubocurarina en un paciente de 55 años que estaba bajo tratamiento con verapamilo (120 mg/día). El
bloqueo neuromuscular fue refractario a neostigmina, pero no a edrofonio.
REFERENCIAS BIBLIOGRÁFICAS
1 Kraynack BJ. Anesthesiology 1982;57:A265. 2 Bikhazi GB. Anesthesiology 1982;57:A268. 3 Durant NN. Anesthesiology 1984;60:298. 4 Anderson KA. Br J Anaesth 1985;57:775. 5 Wali FA. Acta Anaesthesiol Scand 1987;31:15. 6 Van Poorten JF. Anesth Analg 1984;63;155. 7 Jones RM. Anesth Analg 1985;64