litiasis
Litiasis, formación patológica de cálculos (formaciones de aspecto y consistencia pétreas) en la vía biliar o urinaria (véase Vesícula biliar; Riñón). Los cálculos renales (urolitiasis) de calcio (véase Calciuria) se forman en las alteraciones hereditarias hipercalciuria idiopática, acidosis tubular renal distal e hiperoxaluria idiopática, y en la hiperuricosuria por ingesta excesiva de ácido úrico. Los de ácido úrico aparecen en las enfermedades metabólicas hereditarias gota, hiperuricosuria idiopática o síndrome de Lesch-Nyhan, y en los cuadros de deshidratación. Los cálculos de estruvita se forman en las infecciones urinarias, sobre todo por el bacilo Proteus. Pueden ser asintomáticos, producir cólicos al progresar por la vía urinaria, obstruir la vía urinaria produciendo hidronefrosis, crecer en la pelvis renal (cálculos en “hasta de ciervo”), o producir calcinosis renal. Debe tratarse la enfermedad causante para evitar su formación. Cuando está indicada su extracción (por obstrucción, infección, dolor o sangrado), se realiza con diversas modalidades de litotricia, o recurriendo a la cirugía. El 20% de los cálculos biliares son de bilirrubina y el 80% de colesterol o mixtos. Los primeros son más frecuentes en poblaciones asiáticas y rurales, y en personas que padecen enfermedades hemolíticas o cirrosis alcohólica. Los de colesterol son más frecuentes en occidentales, obesos, mujeres, dietas de adelgazamiento y uso de fármacos hipolipemiantes. Los cálculos biliares pueden ser asintomáticos, producir cólicos biliares al progresar por la vía biliar, o complicarse en forma de ictericia por obstrucción de esta vía, colecistitis, colangitis o pancreatitis. Se tratan mediante colecistectomía (véase Laparoscopia).