endocarditis
Endocarditis, infección e inflamación de la membrana que recubre las cavidades y válvulas del corazón. Puede ser aguda, si aparece de forma brusca y puede causar la muerte en pocos días, o subaguda, si se desarrolla lentamente y causa la muerte tras varios meses. La mayoría de las agudas están causadas por la bacteria Staphylococcus aureus, mientras que la mayoría de las subagudas están causadas por estreptococos. Ambos tipos también pueden deberse a micosis. Las endocarditis bacterianas subagudas producen fiebre, toxemia, y lesiones de las válvulas cardíacas; los fragmentos que se separan en estas lesiones valvulares pueden producir embolias. Las infecciones del endocardio y de las válvulas pueden, a menudo, ser ocasionadas a partir de infecciones anteriores de los dientes, las anginas o los senos paranasales. La enfermedad se caracteriza por el crecimiento bacteriano o fúngico sobre el endocardio y/o sobre el tejido valvular cardiaco. Presenta su máxima incidencia de los 30 a los 50 años. El tratamiento prolongado con antibióticos a dosis elevadas cura la infección endocárdica, pero los daños causados en el tejido valvular no pueden ser reparados (y si afectan a la función cardiaca han de ser tratados mediante cirugía). El uso frecuente de penicilina y otros antibióticos durante las manipulaciones dentales y durante las infecciones bacterianas del tracto respiratorio (amigdalitis, sinusitis) ha disminuído la incidencia de endocarditis. Hoy en día, en el mundo desarrollado, la mayor parte de las endocarditis que se diagnostican se producen en drogodependientes por vía intravenosa, tras punciones con material contaminado y en condiciones sépticas.