Mantequilla vs. Margarina: ¿Cuál elegir?

La mantequilla y la margarina son dos tipos de grasa cuya composición y sabor las hace ideales para utilizar como añadido en bocadillos, galletas, tostadas y hasta en la cocción de algunas masas y pastas. Ambas suelen ser ricas en grasas y calorías, aunque apenas proporcionan proteínas e hidratos de carbono. ¿Cuál elegir? ¿En qué se diferencian?

La gran diferencia entre la mantequilla y la margarina estriba en su composición y origen, pues la mantequilla procede exclusivamente de la nata de leche, mientras la margarina se elabora a partir de complejos procesos tecnológicos donde se utiliza aceite 100% vegetal para lograr esa consistencia específica.

Además, la mantequilla contiene un tipo específico de grasas que son muy dañinas para nuestro organismo y que se conocen como grasas trans, las cuales representan entre el 80-85% de su contenido, el porcentaje restante es agua. Al contrario, la margarina posee niveles ínfimos de este tipo de grasa debido a los aceites que se usan para su elaboración, así como a los métodos que se emplean durante el proceso de preparación.

También es muy sencillo reconocer la mantequilla y la margarina a partir de su sabor. Por lo general, la mantequilla tiene un sabor mucho más fuerte e intenso mientras que la margarina es un poco más suave. Es precisamente por esta sutil diferencia que muchos prefieren apostar por la mantequilla, si bien la margarina sería mucho más saludable ya que contiene menos ácidos grasos saturados.

No obstante, se debe puntualizar que debido a su elevado aporte en grasas, los especialistas en nutrición no recomiendan el consumo frecuente de ninguno de estos productos. Obviamente, en la actualidad se pueden encontrar mantequillas bajas en calorías y grasas que pueden convertirse en una alternativa interesante y menos dañina. De hecho, no debemos olvidar que la mantequilla nos aporta vitaminas A y D.

Por otra parte, las personas que deben vigilar sus niveles de colesterol, sería mejor que apostasen por la margarina vegetal ya que la mixta contiene demasiada grasa. En este caso, también podemos disfrutar de su contenido en vitaminas A y E, así como minerales y fitoesteroles.