Entrenar con intensidad para quemar grasas

Quemar grasa no es tan sencillo como muchos ejercicios o dietas milagrosas hacen parecer. Ocurre que antes de deshacernos de ella, es necesario que el cuerpo utilice hidratos de carbono como combustible.

Esto no ocurre al iniciar una actividad física, y es por ello que se requiere de grandes volúmenes de entrenamiento y mucha paciencia para que la cantidad de grasa perdida sea significativa. Es cierto que los entrenamientos prolongados a baja intensidad son una de las mejores opciones que hay para quemar grasas, puesto este tipo de ejercicios utilizan ácidos grasos libres como combustibles. Pero las calorías que se quemen serán en su mayoría de hidratos de carbono.

Una alternativa poco común pero efectiva para quemar grasas en un menor tiempo es la de combinar esfuerzos máximos y muy cortos con pausas completas y activas. Un ejemplo de esto sería realizar un sprint de máxima velocidad durante 10 segundos, y descansar 3 minutos un a ritmo muy suave de carrera o caminata.

Ocurre que las hormonas involucradas en ejercicios máximos tienen entre sus funciones acelerar la combustión de grasas para proveer energía al músculo durante los tiempos de recuperación.Estas hormonas son principalmente la adrenalina y noradrenalina (hormonas denominadas catecolaminas) y la somatotropina (también llamada hormona del crecimiento).

Es importante enfatizar que esas hormonas sólo se activan en un esfuerzo sumamente intenso, por lo que es necesario recuperarse por completo (entre 3 y 5 minutos) entre cada movimiento intenso.

En las pausas es importante que la intensidad no sea elevada, ya que, además de no lograr la recuperación necesaria, se estará generando ácido láctico.  Este subproducto aparece con esfuerzos de entre 15 segundos y 3 minutos que sean de una intensidad relativamente alta, aunque no máxima.

Estos conceptos fisiológicos pueden aplicarse a distintos entrenamientos. No sólo es posible realizarlo corriendo. Tmabién se puede desarrollar en la bicicleta, el simulador de remo, o incluso intercalando ejercicios intensos en un gimnasio con pausas aeróbicas.

Además de mejorar la velocidad, se estará contribuyendo al anhelo de muchas personas: quemar grasas.