El aspecto oculto de las camas solares

Por ejemplo, solo en los Estados Unidos, se estima que unos 30 millones de personas utilizan las camas solares aún cuando la Organización Mundial de la Salud las ha calificado como agentes cancerígenos.

Sin embargo, son muchas las investigaciones que alertan sobre el uso de esta forma de bronceado ya que la misma se ha relacionado con el cáncer de piel. Un estudio reciente desarrollado en la Escuela de Salud Pública de Yale reafirma esta idea y apunta además que las camas solares aumentan las probabilidades de desarrollar enfermedades cutáneas. Exactamente, se hace referencia a que las personas que usaban las camas solares tenían un riesgo del 69% de padecer un carcinoma. Los investigadores aseguran que el bronceado artificial es muy común en los pacientes jóvenes con cáncer de piel, sobre todo entre las mujeres.

Otro estudio realizado en la Universidad de Minnesota también confirma esta idea. En este caso los investigadores encontraron que las camas solares aumentan en un 74% las probabilidades de desarrollar un melanoma, el cáncer de piel más agresivo. En esta oportunidad se analizaron a 750 personas con menos de 40 años y se apreció que un tercio de ellos ya habían desarrollado algún tipo de cáncer de piel.

Los expertos alertan sobre el hecho de que en los últimos 30 años los casos de melanoma han aumentado exponencialmente y se estima que en los Estados Unidos se diagnostican anualmente unos 70.000 casos nuevos. Afortunadamente, este problema tiene solución, basta dejar de utilizar las camas solares y usar cremas protectoras de la piel.