7 tips para cepillarse los dientes que probablemente desconoces

Cuando somos pequeños, nuestros padres nos enseñan a lavarnos los dientes. Más tarde, esos movimientos se automatizan y ya no tenemos que pensar más en ellos. Como resultado, cada cual tiene su propia rutina para cepillarse los dientes. Sin embargo, es probable que durante años hayas estado cometiendo algunos errores que afectan tu salud dental.

1. Espera 30 minutos después de comer. Lavarse la boca inmediatamente después de comer puede ser perjudicial para los dientes. Durante este tiempo, los niveles de pH en la boca son más bajos y ácidos de lo normal por lo que si te cepillas los dientes, acabarás dañando su esmalte.

2. Comienza a cepillarte los dientes por diferentes partes. Casi todos tenemos una rutina para cepillarnos los dientes y con frecuencia comenzamos por el mismo lugar. Sin embargo, expertos de la American Dental Association recomiendan que cada vez que nos lavemos los dientes, comencemos por un lugar diferente. Así haremos que este hábito se vuelva consciente y podremos llegar a todos los dientes por igual.

3. Presta atención a tus molares y al interior de los dientes. La mayoría de las personas suelen prestar más atención a la parte frontal de los dientes. Quizás se trata de algo inconsciente pero lo cierto es que casi todos pasamos más tiempo cepillando la zona frontal que el resto de la dentadura. Sin embargo, también es importante cepillar con esmero los molares y la parte interior de los dientes, zonas que tienen un alto riesgo de enfermar y desarrollar caries.

4. Lava tus dientes durante al menos 2 minutos. A veces las prisas o los malos hábitos, hacen que nos lavemos la boca en cuestión de segundos. Sin embargo, los especialistas recomiendan cepillar durante al menos durante 2 minutos. Así podremos estar seguros de que hemos eliminado la placa y las bacterias.

5. Sé gentil con tus dientes. Hay quienes piensan que mientras más vigoroso sea el cepillado, mejor. No obstante, si cepillamos con demasiada fuerza, podemos causarnos daños en las encías. Por tanto, lo mejor es un cepillado circular, más suave pero también más largo. Los dentistas afirman: “cepíllate como si estuvieras limpiando un mueble de mucho valor”.

6. Asegúrate de usar el cepillo adecuado. Tan importante como la forma en que lavamos nuestros dientes, es el tipo de cepillo que usamos. Si es demasiado chico o muy grande, es probable que no llegue adecuadamente a cada región de la boca. Otro problema puede ser recurrir a cepillos con cerdas demasiado rígidas, que terminan dañando las encías y el esmalte. Por eso, la American Dental Association recomienda utilizar cepillos de cerdas suaves que se adapten al tamaño de nuestra boca.

7. Mantén limpio tu cepillo de dientes. Aunque tu cepillo parezca limpio, cuando terminas de lavarte los dientes es importante que lo enjuagues bien y que lo guardes en un sitio protegido y fresco. De hecho, en el cepillo de dientes también pueden habitar las bacterias que provocan las caries y dañan nuestras encías.