Los suplementos de pescado: ¿Realmente previenen el declive mental?

En el pasado se pensó que como el cerebro tiene una composición elevada de ácidos grasos poliinsaturados (que se encuentran presentes en el aceite de pescado), aumentar su concentración a partir de la dieta cotidiana o de los suplementos podría evitar el deterioro cognitivo y la demencia. Sin embargo, esta idea aparentemente genial y muy lógica ha demostrado que tiene sus puntos débiles.

El problema se generó cuando investigadores de la Escuela de Higiene y Medicina Tropical de Londres analizaron los resultados de tres estudios anteriores que se extendieron durante periodos que oscilaron entre seis meses y tres años.

Así, encontraron que no habían cambios significativos en las pruebas de aprendizaje y memoria entre las más de 4.000 personas (con una medida de edad de más de 60 años) que participaron en los respectivos estudios y que consumían suplementos de omega-3, de aceite de girasol o de aceite de oliva.

Los investigadores indican que quizás los suplementos de pescado con omega 3 necesitan más años para provocar cambios en nuestro organismo o quizás, nuestro cuerpo simplemente asume todos los ácidos grasos que necesita a través de los alimentos y el resto se desecha.

De una forma u otra, estos especialistas recomiendan otras opciones para prevenir el deterioro cognitivo como mantener un estilo de vida saludable, practicar ejercicio físico y entrenar la memoria con simples ejercicios mnemotécnicos.

Además, también indican que los suplementos de pescado no están exentos de efectos secundarios.  Aunque normalmente son bastante seguros para la mayoría de las personas, si tomas más de 3 gramos al día podrías presentar problemas de coagulación de la sangre y aumentará el riesgo de hemorragia. A la misma vez, pueden disminuir la actividad del sistema inmune.