Las bebidas energéticas: ¿Son seguras para la salud?

El resurgir del interés de la población por el ejercicio físico no solo ha hecho que surjan nuevos gimnasios sino también ha dado lugar a los más variados suplementos alimenticios como las bebidas deportivas o las bebidas energéticas, productos que prometen un mejor desempeño físico, un crecimiento más rápido de la musculatura y una recuperación del cansancio y la fatiga más veloz. Pero, independientemente de estas promesas se mantiene en pie una pregunta: ¿las bebidas energéticas son seguras para nuestra salud? ¿pueden beberse sin ningún riesgo mientras realizamos ejercicio físico?

John Higgins, profesor de la Escuela de Medicina de la Universidad de Texas afirma que consumir las bebidas energéticas durante una sesión de ejercicios no comprende ningún riesgo para la salud siempre que las personas estén sanas. No obstante, también puntualiza que el exceso de estas bebidas (al igual que el consume excesivo de cafeína), puede provocar efectos adversos para la salud.

Actualmente las personas que más consumen estas bebidas son los jóvenes, con edades comprendidas entre los 11 y los 35 años pero muchos de ellos no conocen que el ingrediente más común de estas bebidas energéticas es la cafeína, que se encuentra presente en un rango que varía entre los 50 miligramos hasta los 505 miligramos por cada 16 onzas de bebida (ésta última una dosis bastante elevada, mucho mayor que la que podemos hallar en una tasa de café).

Otras investigaciones provenientes de la prestigiosa Clínica Mayo puntualizan que el consumo en exceso de las bebidas energéticas o el hábito de ingerir aquellas con una mayor dosis de cafeína puede provocar problemas en el sistema cardiovascular, conducir a la hipertensión o incluso sufrir el riesgo de arritmias cardiacas. Añadiéndole los consabidos efectos sobre la salud psicológica como el aumento de la irritabilidad y una mayor propensión a la ansiedad.

Así, muchos especialistas aconsejan beber mucho agua para mantenernos hidratados mientras hacemos ejercicio físico y disminuir el consumo de las bebidas energéticas.