La bemiparina contra el cáncer de pulmón

Según un estudio reciente presentado por los Laboratorios Farmacéuticos Royi en el XIII Congreso Nacional de la Sociedad Española de Oncología Médica, se ha evidenciado que el consumo de bemiparina suele mejorar los resultados clínicos en el tratamiento del cáncer de pulmón y alarga la esperanza de vida de estas personas.

El estudio estuvo orientado a evaluar la eficacia y la seguridad de la bemiparina en los pacientes con cáncer microcítico de pulmón limitado que reciben el tratamiento antitumoral habitual (consistente en radioterapia y quimioterapia).

Como principal resultado se obtuvo que los pacientes que habían consumido la bemiparina prolongaron 1,5 veces el tiempo de supervivencia (libre de la enfermedad). Además, la supervivencia total (con la enfermedad en curso) fue superada 3,3 veces; siempre en comparación con los pacientes que presentaban la misma patología pero que no fueron tratados con este medicamento.

Hoy por hoy se desconocen los mecanismos de acción del medicamento aunque se hipotetiza que podría interferir en el proceso natural de la coagulación de la sangre actuando sobre la trombina (una sustancia que está implicada en el proceso de coagulación).

Además, los especialistas alertan que es imprescindible tomar la bemiparina siempre en el mismo horario del día y que no se administre nunca por vía intramuscular.

También se debe conocer que la bemiparina puede ser peligrosa para las personas que tienen otras enfermedades como las alteraciones sanguíneas, la hipertensión no controlada, la úlcera gastrodeudonal, un accidente cerebrovascular u otras afectaciones en el hígado o el riñón. Además, se debe tener presente que la bemiparina incide en la acción de ciertos medicamentos como la aspirina, algunos anticoagulantes orales, antiagregantes plaquetarios o antiinflamatorios no esteroideos pues puede provocar efectos adversos en estos pacientes. Por ende, su consumo debe ser regulado e indicado por un médico que conozca el historial del paciente.