Frutos secos para vivir más

Los frutos secos son los reyes del otoño y el invierno. De hecho, no hay nada mejor que sentarnos delante de una chimenea a comer castañas calientes. Sin embargo, más allá de su sabor, los frutos secos nos aportan muchísima energía y son muy nutritivos por lo que deberían formar parte de nuestra dieta cotidiana. Ahora un novedoso estudio publicado en la prestigiosa New England Journal of Medicine nos da una razón adicional para incluirlos en nuestra dieta cotidiana: los frutos secos alargan la esperanza de vida.

El estudio en cuestión ha sido uno de los más completos realizados hasta la fecha sobre los frutos secos y la salud. Los investigadores del Birgham Hospital analizaron los datos de más de 100 mil personas que no tenían antecedentes de infarto, ictus ni cáncer. Les dieron seguimiento durante un periodo de 30 años teniendo en consideración sus hábitos alimenticios y, obviamente, el consumo de frutos secos.

Al cabo de este tiempo, pudieron apreciar que las personas que consumían 7 raciones o más de frutos secos a la semana, presentaban un 20% menos de probabilidades de morir debido a enfermedades respiratorias, cáncer y problemas cardiovasculares. Específicamente, los datos demostraron que los frutos secos marcaban la diferencia y podían reducir en un 11% las posibilidades de desarrollar un cáncer y en un 29% el riesgo de mortalidad como consecuencia de una patología cardiovascular.

En la búsqueda de una explicación

¿Por qué los frutos secos protegen nuestra salud y nos permitirían vivir más? Los investigadores creen que la clave se encuentra en la cantidad de nutrientes que nos ofrecen. De hecho, los frutos secos no solo contienen muchas vitaminas y minerales sino también una generosa cantidad de ácidos grasos insaturados, proteínas de alta calidad, fibra y fitoquímicos como los flavonoides y los carotenoides. Se conoce que todas estas sustancias actúan protegiendo nuestro corazón y las arterias, además de ser anticancerígenas y antiinflamatorias. Por no hablar de que tienen un elevado poder antioxidante y nos ayuda a combatir los radicales libres y el envejecimiento precoz.

En este punto el consejo es muy evidente: incluye los frutos secos en tu dieta cotidiana, podrás vivir más años y con una mejor calidad de vida.