Las propiedades del vino: Una inestimable fuente de salud

El  vino es una de las bebidas más antiguas que se conoce; no obstante, el debate de la comunidad científica alrededor de las propiedades del vino (tanto positivas como negativas) recién ahora parece haberse resuelto. Así, hoy por hoy la mayoría de los especialistas coinciden en el hecho de que beber dosis moderadas de vino de manera regular es un hábito beneficioso para la salud.

Entre las múltiples propiedades del vino se encuentra la prevención de las enfermedades coronarias. De hecho una investigación publicada en la American Journal of Physiology indica que el resveratrol presente en el vino inhibe la formación de la proteína que produce la fibrosis cardiovascular y facilita la dilatación de las arterias por lo que también prevé la arterioesclerosis.

Recientemente otro componente del vino ha llamado la atención de los científicos: las catequinas, que actuarían como agentes antioxidantes previniendo que los radicales libres dañen las células de manera que el vino podría ser una forma de prevenir el cáncer, sobre todo los tumores colorrectales y de la piel.

Otros componentes del vino estimulan el sistema inmunológico e incluso se cree que pueda prolongar la vida. En este sentido una investigación realizada en la Universidad de Harvard y publicada en la revista Nature afirma que el resveratrol presente en el vino podría extender la vida de las células e incluso actuaría preservando las capacidades cognitivas por lo que podría incluirse como uno de los alimentos que previenen el Alzheimer y el Parkinson.

Continuando con las propiedades preventivas del vino, según afirma la American Journal of Gastroenterology, consumir esta bebida en pequeñas cantidades disminuye el riesgo de padecer úlceras pépticas ya que ayuda al organismo a liberarse de las bacterias que las causan.

Por otra parte, siempre de la mano de investigadores de la Universidad de Harvard, hemos podido conocer que consumir pequeñas dosis de vino pueden disminuir hasta en un 50% el riesgo de padecer diabetes.

Por supuesto, estos mismos especialistas apuntan que el consumo moderado de vino se refiere a la ingesta de no más de dos vasos de vino diarios. Ya sabemos que los excesos lejos de ayudar nuestra salud, terminan minándola.