¿Cuánta Vitamina C necesitamos diariamente?

La Vitamina C se encuentra fundamentalmente en las frutas y los vegetales. Nuestro cuerpo necesita la Vitamina C para mantener fuertes tanto el tejido conectivo como los vasos sanguíneos, para la cicatrización de las heridas y para la función saludable del sistema inmunológico. Pero… ¿cuánta Vitamina C necesitamos diariamente?

Los especialistas sugieren que las mujeres necesitan al menos 75 mg al día mientras que los hombres necesitan un poco más: unos 90 mg. La dosis máxima que puede metabolizarse es de 2.000 mg al día. Normalmente podemos adquirir toda la Vitamina C que necesitamos de nuestra alimentación cotidiana sin la necesidad de acudir a los suplementos vitamínicos.

Para estar seguros de que consumimos la cantidad de Vitamina C que necesitamos a diario, nada mejor que conocer cuáles alimentos contienen esta vitamina y en qué cantidades.

– Zumo de naranja. Un vaso de 8 onzas de zumo contiene 97 mg de Vitamina C. Así que si bebemos un vaso de zumo de naranja estaremos satisfaciendo nuestra necesidad de vitamina. No obstante, si bebemos la misma cantidad de zumo de naranjas pero estas están recién exprimidas, entonces podremos consumir hasta 125 mg.

– Pimientos. Un pimiento verde de tamaño medio contiene 95 mg de Vitamina C, lo cual es suficiente para una dosis cotidiana. Como datos extra, el pimiento también posee 209 mg de potasio y solo 24 calorías, lo que lo convierte en un alimento bastante saludable.

– Boniato, batata o camote. Media taza de puré de boniato contiene 20 mg de Vitamina C, por lo que si ingerimos una taza completa habremos satisfecho la demanda cotidiana de esta vitamina.

– Patatas. Una patata media al horno con su cáscara posee 17 mg de Vitamina C.

– Fresas. Una fresa posee 7 mg de Vitamina C por lo que 11 fresas podrían satisfacer la demanda de vitamina en el caso de las féminas. Además, esta misma cantidad de fresas posee 21 mg de calcio.

En menores cantidades la Vitamina C también puede hallarse en las espinacas y en el brócoli. Debe puntualizarse que la deficiencia de Vitamina C produce enfermedades como el escorbuto, pero también favorece la gengivitis, la piel reseca, la cicatrización lenta, dolor e inflamación articulares y el aumento de peso.