¿Las propiedades del aceite de onagra son beneficiosas para la salud?

El aceite de onagra se obtiene de la planta del mismo nombre y se utiliza preferentemente para tratar los problemas cutáneos. No obstante, en la actualidad sus poderes curativos se han aplicado a los casos de artritis reumática, osteoporosis, cáncer, esclerosis múltiples, Alzheimer, asma, diabetes, tos, colitis ulcerativa y otras muchísimas enfermedades. Esta sustancia también se utiliza como medida preventiva para controlar la pre-eclampsia, acortar el periodo del parto y prevenir la endometriosis.

Sin embargo, ¿las propiedades del aceite de onagra lo convierten en una sustancia realmente tan efectiva? ¿Están comprobados científicamente todos estos beneficios?

Hasta el momento la Natural Medicines Comprehensive Database afirma que la evidencia científica respalda que el aceite de onagra es beneficioso y eficaz para tratar la mastalgia (dolor en el seno) y la osteoporosis (sobre todo en conjunto con el aceite de pescado). A la misma vez, puntualizan que esta sustancia no es eficaz para tratar el Síndrome Premenstrual ni el Trastorno por Déficit de Atención e Hiperactividad.

En esencia el aceite de onagra contiene una serie de ácidos grasos que son los responsables de disminuir los procesos inflamatorios relacionados a enfermedades como el eczema y la artritis y es por esto que muchas personas recurren a su uso obteniendo resultados bastante positivos.

Además, el consumo del aceite de onagra es bastante seguro para la mayoría de las personas; si bien algunos de los efectos indeseados que pueden experimentarse son: dolor de cabeza, nauseas, diarreas y problemas del estómago generales. Eso sí, no se debe consumir durante el embarazo, si la persona tiene problemas de coagulación de la sangre o si tiene una predisposición a la epilepsia.

También se debe tener en cuenta que el aceite de onagra puede interactuar con algunos alimentos o hierbas como el ajo, el jengibre, la cúrcuma y el clavo de olor retardando la coagulación sanguínea.

La dosis más común y recetada por el médico son de 3 a 4 gramos al día (pero solo para aliviar el dolor en los senos ya que su efecto benéfico sobre el resto de las enfermedades no está totalmente comprobado).

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