Consejos para armar un sandwich
A pesar de que en numerosas ocasiones se asocia a los sandwiches con la comida chatarra, estos pueden ser una opción muy saludable. Todo depende de los ingredientes que elijamos, pero podemos lograr algunas combinaciones que aporten pocas calorías y varios nutrientes. Veamos algunas pautas y ejemplos.
En primer lugar, es recomendable usar panes integrales para aumentar le contenido de fibra. De todas formas, vale aclarar que aquel que prefiera el pan blanco, no sumará más calorías por ello. En cualquiera de los casos, es bueno no usar rebanadas muy gruesas, pues excedernos con las cantidades en cualquier alimento aumentará considerablemente las calorías. En el pan se encuentran los hidratos de carbono de un sandwich.
También debemos considerar los aderezos que usemos, puesto que muchas veces estos terminan siendo los que transformen un sandwich en poco recomendable para la dieta . Es mejor evitar la mayonesa o, aún peor, la mantequilla, ya que contiene muchas calorías, varias de ellas de las grasas. La mostaza es una alternativa sabrosa y con un aporte mínimo de calorías. También puede usarse, con un poco más de moderación, ketchup o mayonesas reducidas en calorías.
¿Qué poner dentro? Incluir la mayor diversidad posible de verduras es apropiado, ya que así estaremos incorporando vitaminas y minerales. Tomate, lechuga, cebolla, pepinos son algunas buenas alternativas que pueden consumirse sin límites.
En cuanto a las proteínas, lo recomendable es que estas no vengan de embutidos o fiambres de alto contenido graso. Es preferible usar carnes magras, como el lomo de vaca, el peceto, el pollo, la pechuga de pavo o el pescado.
También puede incluirse un huevo en el sandwich, lo que aumentará las proteínas del mismo. En cuanto al queso, este debe consumirse moderadamente. Se debe optar por quesos con menor contenido graso, descartando así los más duros.
Como vemos, un sandwich puede ser rico y saludable a la vez. Existen opciones para todos los gustos.